País dividido
Estados Unidos es un país dividido por el aborto. Alaska, California, Delaware, el Distrito de Columbia, Hawali, lowa, Maíne, Maryland, Nuevo Mexico, Dakota del Norte, Oregon, Vermont y Washington son los únicos estados donde es posible abortar. La lucha entre los pro y los anti abortístas no ha terminado en el resto de los estados.La sentencia no evitará que esta misma semana se concentren decenas de personas frente a las clínicas de San Francisco o Nueva York donde se realizan este tipo de intervenciones, con pancartas con frases como "Salvar a los niños" o "Stop al aborto, ahora".
Anualmente se interrumpen en este país 1,6 millones de embarazos. En 1973 esa cifra no superaba los 750.000 casos. Las estadísticas señalan también que es probable que las mujeres de origen hispano tengan un 60% más de posibilidades de tener que recurrir al aborto que la mujeres blancas, pero las mujeres negras tienen una probabilidad todavía mayor.
Estadística
Entre las mujeres con ingresos inferiores a los 11.000 dólares anuales, la probabilidad de un aborto es tres veces mayor que entre aquellas cuyos ingresos superan la barrera de los 25.000.
Los perfiles de la población femenina norteamericana susceptible de abortar señalan que las solteras tienen entre cuatro y cinco veces más probabilidades de abortar que las casadas; que las católicas son las mujeres que más abortan y que cada año el 3% de las mujeres con edades entre los 15 y los 44 años deciden abortar.
Durante la deliberación del Tribunal Supremo, la Prensa se han volcado en reflejar lo que ocurre en la calle. Las estadísticas han sido concluyentes: el 47% de los americanos está a favor del aborto, el 48% en contra y el resto, el 5%, no está seguro. El 50% opina que el aborto, en sí mismo, es una mala práctica, el 43% no opina así y el 7% no responde. Esta estadística, publicada por Time en mayo pasado, se refleja en la calle.
La lucha de las manifestantes ha mostrado el sentimiento dividido de Estados Unidos que el presidente Bush, un conocido antiabortista, ha tratado de aliviar con una frase: "América debe adoptar en vez de abortar".
