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Gorbachov reemprende en París su ofensiva europea

El líder soviético, Mijail Gorbachov, inicia hoy una visita de tres días a París y Estrasburgo. Sus tres entrevistas con el presidentefrancés, François Mitterrand, estarán dominadas por el desarme, la construcción europea y la cooperación bilateral. El jueves expondrá ante el Consejo de Europa, en Estrasburgo, su concepción de la casa común en el Viejo Continente. El máximo dirigente del Kremlin reemprende así, en Francia, su ofensiva europea.

Las conversaciones sobre desarme abarcarán desde el aspecto nuclear hasta las negociaciones sobre armamento convencional de Viena, que han recibido un nuevo impulso tras la reciente oferta del presidente norteamericano, George Bush.Mitterrand quiere conocer la respuesta soviética al ofrecimiento norteamericano de reducción de tropas en Europa, en una negociación que constituye para Francia la máxima prioridad. Vadim Zagladin, miembro del Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS) y consejero de Gorbachov, declaró ayer que "sería prematuro" abordar negociaciones sobre la fuerza nuclear francesa o británica, que ligó a la reducción de los misiles de corto alcance. Mitterrand y Gorbachov tratarán asimismo de la aplicación concreta de las conclusiones de la Conferencia de Seguridad y Cooperación en Europa (CSCE) y de las negociaciones sobre armas químicas que se celebran en Ginebra.

La segunda visita a Francia del líder del Kremlln ha sido recibida con escepticismo -destacado por los portavoces soviéticos- sobre el futuro de la perestroika, y con cierta hostilidad en algunos sectores políticos. Zagladin rechazó la opinión del ex ministro de Economía de Jaeques Chirac, Edouard Balladur, quien ayer por la mañana declaró que Gorbachov pretendía con su visita debilitar la defensa nuclear francesa. "La URSS", dijo Zagladin, "no quiere debilitar la defensa de nadie, sino defender la seguridad para todos, mediante una reducción de fuerzas".

Programa austero

El programa -que no fue completado hasta ayer por la tarde a causa de las discrepancias sobre algunos detalles- es mucho más austero que el del reciente viaje de Gorbachov a Bonn. Incluye un solo baño de multitud en la visita, hoy, al barrio de la Bastilla. Gorbachov ha querido disponer de tiempolibre para seguir de cerca la delicada situación en la URSS. Mañana, el presidente soviético se reunirá en la Sorbona con intelectuales y estudiantes, visitará brevemente a Chirae en el Ayuntamiento y comerá con el primer ministro, Michel Rocard. Aderriás de la cena oficial de hoy, el matrimonio Mitterrand ofrecerá el miércoles a Gorbachov y a su esposa, Raísa, una cena a solas en su residencia privada, deferencia que no es habitual.

Los dos presidentes mantendrán mañana una conferencia de prensa conjunta tras la firma de una veintena de acuerdos bilaterales, entre los que destacan la apertura de un centro cultural francés en Moscú, el primero de un país occidental; un programa de formación de directivos soviéticos en Francia; un acuerdo marco sobre la televisión de alta definición, y un compromiso para proteger las inversiones francesas en la URSS.

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Mitterrand y Gorbachov celebrarán su tercera y última entrevista el jueves por la mañana, antes de que el dirigente soviético se desplace a Estrasburgo. A mediodía, Gorbachov desarrollará ante el Consejo de Europa su idea de la casa común europea. Este discurso, esperado con gran expectación, se convertirá seguramente en el elemento de mayor calibre político del viaje, aunque, protocolariamente, no pertenecerá ya a la visita oficial a Francia, puesto que el Consejo de Europa goza de extraterritorialidad.

Idea sin contenido

Francia considera que el concepto de casa común europea es una bella idea que hay que llenar de contenido. Mitterrand, que ha hecho de la apertura al Este uno de los ejes de su segundo septenlo, piensa que uno de los muebles que debe llenar la casa común del Atlántico a los Urales es la profundización de las libertades en Europa oriental, especialmente la circulación de personas y la libre expresión de las ideas. Preguntado ayer sobre el mobiliario de la casa común, Zagladin retomó el símil al contestar: "Estos días se va a discutir en París qué fábrica va a construir los muebles. Creo que será una empresa mixta franco-soviética", bromeó, en referencia a uno de los contratos que se van a firmar durante la visita, La empresa francesa de muebles Seribo creará una sociedad mixta para invertir 200 millones de francos (unos 3.800 millones de pesetas) en Ucrania.

Siempre en el tono conciliador que caracteriza las declaraciones de los 16 intelectuales y funcionarios enviados en avanzadilla por Gorbachov a París, Zagladin admitió la aportación de Estados Unidos y Canadá (países no europeos participantes en la CSCE) en el diseño de la casa común, junto a todos los Estados europeos. Gorbachov llegará a Estrasburgo acompañado de un grupo de diputados soviéticos que participarán en un coloquio sobre las relaciones Este-Oeste con parlamentarios europeos y de EEUU.

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