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Guerra a los 'revientapisos'

Interior pone en marcha una campaña publicitaria para evitar robos veraniegos

El Ministerio del Interior ha declarado la guerra a los revientapísos. Durante estos días, medio millón de madrileños recibirán por correo una carta de Rafael Vera, secretario de Estado para la Seguridad, con recomendaciones para evitar que mientras ellos se tuestan en la playa los ladrones les limpien la vivienda. Además, el Gobierno ha puesto en marcha por primera vez una campana de publicidad en prensa, radio y televisión para insistir en los mismos consejos. El coste de esta iniciativa asciende a 30 millones de pesetas.

Desde primeros de año, la policía ha comprobado un ligero aumento del número de robos a domicilio en Madrid, lo que hace temer un verano caliente para esta actividad delictiva.En el verano de 1986, los asaltos a viviendas madrileñas llegaron a 2.200. Sin embargo, la mayor presión policial consiguió que en 1987 bajara el listón a 1.512. El año pasado se repitió prácticamente la misma cifra: un total de 1.526 asaltos.

La Jefatura Superior de Poli cía de Madrid pondrá en marcha por segundo año consecutivo un plan para evitar los robos en domicilios, principalmente en los situados en los barrios de Chamartín, Buenavista y La Estrella, donde se concentra un importante número de fincas de alto nivel económico.

El Ministerio del Interior va a hacer la guerra a los revientapisos basando su estrategia en la colaboración ciudadana: "Si oye ruidos en el piso del vecino y sabe que éste se encuentra de vacaciones, no dude en llamar al 091". Un portavoz oficial aseguró que la policía y la Guardia Civil investigarán todas las denuncias, sin que ello suponga el menor problema para el denunciante.

Mientras que en la región de Madrid se realiza "de forma experimental" el envío por correo de la carta firmada por el secretario de Estad para la Seguridad, en el resto de España se ha iniciado la distribución de 1.200.000 folletos que contienen las recomendaciones clásicas: cuando se ausente, procure que un veicno le vacíe el buzón; no comente sus planes de vacaciones con personas extrañadas...

Cuatro categorías

La policía tiene clasificados a los revientapisos en cuatro categorías: los que pertenecen a la etnia gitana; los quinquis; los de origen suramericano y los drogadictos. Los primeros utilizan fundamentalmente a mujeres que llaman en los pisos con la excusa de pedir limosna. Si no les contesta nadie, en cuestión de segundos sacan un destornillador y echan la puerta abajo.

Los quinquis o mercheros suelen entrar en las viviendas por el procedimiento del escalo, aprovechando las tuberías o los salientes del edificio.

Los revientapisos suramericanos son los más profesionales: sus golpes están bien estudiados y no suelen equivocarse cuando eligen un objetivo. Lo que más les interesa es el dinero, las joyas, los cheques de viaje, los pasaportes y las cámaras fotográficas, según aseguran policías expertos en la lucha contra este tipo de delincuencia.

La cuarta categoría en el escalafón es la que integran los drogadictos. Éstos actúan sin la menor planificación, impulsados por la necesidad de robar algún objeto que posteriormente cambian por unas dosis de heroína. Suelen asaltar los pisos por el método del palanquetazo.

La policía insiste en que una de las mejores medidas para dificultar el trabajo de estos delincuentes veraniegos sería imprimir el número del DNI u otra clave en los aparatos más cotizados por los ladrones. "Eso haría que los peristas o receptadores tuvieran más reparos en comerciar con estas mercancías marcadas", dice un agente.

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