Tres mareas negras azotan las costas de los Estados Unidos

Tres meses después de la catástrofe ecológica provocada por el petrolero Exxon Valdez en las costas de Alaska y cuyas consecuencias todavía se están sintiendo, Estados Unidos ha conocido un fin de semana de coincidencias extraordinarias en esta materia. Al menos tres mareas negras importantes se han producido como resultado de otros tantos accidentes de petroleros.

El pasado viernes el petrolero griego World Prodigy que transportaba 26 millones de litros de fuel sufrió un accidente en la bahía de Nagarransett, frente a Newport (Rhode Island) y derramó en el mar 2,2 millones de litros de su carga. El fuel vertido alcanzaba el domingo por la mañana una superficie de tres kilómetros de largo y en algunos sitios tocaba las costas próximas a Newport donde se encuentra una de las zonas residenciales más aristocráticas de Nueva Inglaterra y uno de los puertos deportivos más famosos del mundo.No muy lejos de este lugar se produjo en la mañana del sábado otro accidente. El petrolero uruguayo Presidente Rivera se averió y comenzó a contaminar la desembocadura del Delaware. En este caso se ignoraban las causas que provocaron al Rivera encallar 350 kilómetros al sur de Newport con 72 millones de crudo a bordo. En ambos casos las autoridades marítimas y los técnicos consiguieron reflotar en pocas horas a los buques lo que ha permitido frenar el vertido de más crudo al mar y reducir a la baja las estimaciones sobre contaminación. El Rivera ha dejado escapar alrededor de un millón de litros de petróleo, cantidad que según los guardacostas es calificada de muy seria.

Por otra parte el mismo sábado un petrolero panameño, el Rachel B, contaminó el mar en la bahía de Galveston (Texas) en el golfo de México, con el vertido de casi un millón de litros de crudo tras haber colisionado con un carguero.

La Casa Blanca ha reaccionado esta vez con prontitud -lo contrario que en el caso del Exxon Valdez- y ha enviado a estudiar la magnitud de estas catástrofes al secretario del Interior, Manuel Luján y al director de la agencia para la protección del medio ambiente, William Reilly. Como primera medida para paliar en lo posible la marea negra han sido cerradas las playas próximas al lugar de los vertidos. Mientras tanto se procede a la limpieza de la zona con barcos y detergentes especiales.

Al igual que en el caso del Exxon Valdez parece que estos accidentes se han debido a errores de navegación. Los capitanes de los tres barcos han sido citados por las autoridades administrativas para esclarecer las causas del accidente y proseguir incluso, si fuera necesario, con acciones judiciales.

Consecuencias

Según las primeras estimaciones elaboradas por guardacostas norteamericanos las tres mareas negras producidas el pasado fin de semana no van a tener consecuencias tan graves como las del Exxon Valdez, entre otras razones porque en esta ocasión el petróleo vertido es refinado.Por ahora la zona menos amenazada por la marea negra parece la de Galveston puesto que ha sido considerada como poco sensible por los expertos en medio ambiente a pesar de que en las cercanías existen criaderos de gambas y de ostras.

Expertos en medio ambiente de los Estados Unidos creen que el petroleo refinado no afecta a las aves con tanta gravedad como el crudo. También resulta más fácil de erradicar de la superficie marina. En una demostración sobre cómo se produce la mezcla del agua con el fuel el senador republicano de Rhode Island, John H. Chaffe introdujo en un frasco tres cuartas partes de agua y una de fue¡ y le sacudió como una coctelera. El resultado se parece a un batido de aceite y vinagre que si se le deja en reposo devuelve a ambos fluidos sus características diferenciadas.Las autoridades de Rhode Island han clausurado las bateas de moluscos de la bahía de Newport hasta el próximo 2 de julio. Esta zona marítima goza de gran tradición pesquera y en ella residen miles de descendientes de pescadores originarios de Portugal.