Gorbachov decide 'apagar' la televisión tras un plante de los diputados lituanos

, La impaciencia del líder Mijail Gorbachov para acelerar y concluir el Congreso de los Diputados esta semana provocó, ayer una espectacular crisis, cuando los representantes lituanos abandonaron la sala como señal de protesta. Por primera vez, la glasnost (transparencia informativa) se interrumpió y la Prensa fue obligada a salir del recinto poco después de las nueve de la noche. Gorbachov anunció una sesión cerrada y las cámaras de televisión dejaron de transmitir tal como venían haciendo puntualmente desde el 25 de mayo.

La iniciativa se produjo durante el recuento de votos para confirmar a Alexandr Sujarev como fiscal general. "Vamos a tener una corta sesión cerrada", dijo Gorbachov, "ruego a la Prensa y a los invitados abandonar la sala".La acción de los diputados lituanos, que dejó cortado y perplejo a Gorbachov, se produjo antes, tras la accidentada votación del Comité de Vigilancia Constitucional, forzada por el líder, pese a la oposición de muchos diputados que se quejaban de haber recibido la lista de miembros apenas una hora antes de la votación. Un diputado lituano explicó que un órgano tan importante no puede ser elegido apresuradamente, ya que podía convertirse en un instrumento de presión del centro sobre las repúblicas y de defensa de un estado unitario. Los diputados lituanos objetaban la fórmula del artículo 125 de la Constitución que da al Comité de Vigilancia Constitucional la última palabra en caso de conflicto entre las leyes de la república y las leyes de la Unión Soviética. Hubo también objeciones a la candidatura de Vladimir Kudriazev, el director del Instituto de Estado y Derecho, como presidente del Comité.

El historiador Roy Medvedev intercedió para que la votación del Comité Constitucional fuera retrasada hasta el otoño para elaborar mientras tanto un estatuto de sus competencias insuficientemente definidas. Gorbachov insistía en que el Comité debía formarse ayer. "Su composición", decía pese a las protestas de los diputados, "ha sido elaborada concienzudamente, seriamente y durante tres meses".

"¿Acaso estoy adquiriendo la impresión equivocada de que alguien piensa que tenemos el deseo de acabar rápidamente el trabajo del Congreso?", preguntó el líder. "Yo por mi parte puedo suponer otra cosa, que alguien quiere alargar el trabaje, del Congreso, obligandonos a debatir diferentes cuestiones. Tanto más cuando el círculo de oradores es el mismo". Una mayoría, no contabilizada, votó a favor de la composición del Comité de Vigilancia Constitucional. Otros 433 diputados lo hicieron en contra y 61 se abstuvieron. Tras unos segundos de confusión, una cincuentena de diputados lituanos se marcharon de la sala. El profesor Fedor Burlatski salió entonces al estrado para salvar la situación y propuso posponer la votación hasta hoy y pedir a Gorbachov que converse con la delegación lituana.

Por la mañana, el economista Nikolai Shmeliov, miembro del grupo de reformistas y jefe de sector en el Instituto de Estados Unidos y Canadá, calificó de "provinciana" la actitud del gobierno que dirige Nikolai Rizhkov por no quererse endeudar en el extranjero como una de las medidas de emergencia para salir de la crisis económica.

El economista advirtió de la inminencia de una quiebra económica, con la posibilidad de un retorno al autoritarismo político, de no tomarse medidas de urgencia para solventar el déficit presupuestario, que supone 120.000 millones de rublos. Shmeliov consideró insuficientes los recortes presupuestarios apuntados por el Gobierno y, entre otras cosas, propuso recortar la ayuda soviética a Cuba. "¿Cuánto cuestan nuestros intereses en Latinoamérica?", dijo Shmeliov, quien, remitiéndose a fuentes norteamericanas, dio la cifra de 6.000 a 8.000 millones de dólares.