Los trabajadores de Renfe no cumplieron ayer los servicios mínimos y el lunes pararán de nuevo

La firma de convenios en buen número de empresas públicas limitó los efectos de la huelga de ayer en transportes, comunicaciones y metal. El paro fue seguido por 160.000 trabajadores de Renfe, Telefónica, astilleros, puertos y Elcano. Sólo se registraron incidentes en el ferrocarril, con roturas de cristales en trenes de cercanías de Madrid y cortes de catenaria (tendido eléctrico) en Zaragoza. Renfe valora los daños causados en sus instalaciones en 75 millones de pesetas y piensa actuar con dureza ante el incumplimiento de algunos servicios mínimos. El lunes habrá paros parciales.

La dirección de Renfe está investigando si el incumpliento de los servicios mínimos ha sido voluntario por parte de los trabajadores que recibieron las cartas -8.170-, lo que seria causa de despido, o han sido los piquetes los que no les han dejado trabajar. Los sindicatos aseguran que no existió violencia y responsabilizan a grupos incontrolados de las roturas de cristales de algunas unidades. Sí han reconocido que se han incumplido algunos servicios mínimos decretados por el Ministerio de Transportes.

Cortes en el tendido

Los incidentes se registraron en el servicio de cercanías de Madrid y Barcelona, con intervención de piquetes que interrumpieron el tráfico y apedrearon algunos trenes. Según la dirección de la empresa 10 unidades quedaron fuera de servicio con los cristales rotos. Los cortes de vía tuvieron lugar en la zona de Atocha, Villaviciosa y Aranjuez. El objetivo de los sindicatos era que las cercanías no funcionaran en un porcentaje superior al 40%, frente a las cifras de la orden ministerial que lo fijaba entre el 50% y el 75%. En Cataluña el cumplimiento ha sido incluso inferior al 40%.También se vieron afectados trenes de largo recorrido con cortes de catenaria (tendido eléctrico) en la línea Barcelona-Coruña-Vigo, a la altura de Zaragoza, por lo que los viajeros tuvieron que ser transportados en taxi o autocar. En los trenes radiales se han producido retrasos medios de dos horas y los incidentes han tenido lugar en Córdoba, Málaga, Asturias y Valencia.

Los sindicatos acusan a la dirección de haber variado el ritmo de salidas y puesto en marcha trenes especiales, mientras que la dirección admite que es "relativamente cierto" que se han intentado sacar más unidades de mercancías que las previstas en la orden ministerial y se hizo así cuando se comprobó que no respetabn los mínimos.

El lunes proseguirá la huelga en esta empresa, con paros parciales de una hora en cada turno, que tendrán lugar de 3 a 4, de 7 a 8 y desde las 19 a las 20 horas, y se repetirán los días 6, 7 y 8. El 9 de junio la huelga será de 24 horas y entre el 10 y el 19 de junio no habrá ningún conflicto por el desarrollo de las elecciones europeas. La participación en el conflicto de ayer fue del 90% según los sindicatos, mientras que la empresa la cifra en un 35%.

No hay prevista ninguna nueva reunion negociadora del convenio y la empresa asegura que deben ser los sindicatos quienes tomen la iniciativa porque ella no tiene nada más añadir después de la reunión que acabó en la madrugada del pasado día 31. Entonces, extraoficialmente, la dirección llegó a ofrecer un incremento del 6,5%, y la ruptura se produjo por discrepancias en jornada y creación de empleo. Los incidentes de ayer colocan las negociaciones en una "situación complicada y de difícil salida" según un portavoz de Renfe.

En el sector naval el paro ha afectado a las empresas Aesa, Astano, Barreras de Vigo, Juliana Constructora Gijonesa y Astander. Otras empresas del sector público que pararon son Telefónica -unos 3.000 trabajadores se concentraron ante la sede en Madrid-, Elcano y la Casa de la Moneda. En total, unos 160.000 trabajadores que tienen problemas en las negociaciones de sus convenios. En Valencia, Cataluña y Andalucía hubo manifestaciones de protesta similares a la desarrollada el jueves en Madrid.