Tres meses de arresto para el contrabandista que dejó incapacitados a dos guardias civiles
La Audiencia Provincial de Lérida ha condenado al contrabandista Fernando Martínez Jiménez, de 30 años de edad y vecino de la localidad andorrana de Sant Juliá de Loria, a tres meses de arresto mayor y privación del permiso de conducir durante un año por atropellar con su vehículo a dos guardias civiles de la Seo d'Urgell. El condenado les causó importantes lesiones que determinaron su baja en el cuerpo de la Guardia Civil por incapacidad permanente. Martínez, para quien el fiscal solicitó seis años de prisión por atentado, deberá indemnizar a los agentes en más de 13,5 millones de pesetas.Martínez fue sorprendido la noche del 28 de febrero de 1984, en la zona de la aduana de la Farga de Moles, cuando transportaba 2.000 cajetillas de tabaco rubio de contrabando y al emprender la marcha no se apercibió que delante de él, en la más completa oscuridad, se hallaba el cabo de la guardia civil José Candelario, que le hacía señales de parada con una linterna y que no advirtió ni obedeció a su tiempo por falta de atención. El agente fue atropellado y su compañero Rafael Márquez que le seguía tuvo que arrojarse por un terraplén. Los guardias, de 36 y 34 años de edad, respectivamente, se han quedado incapacitados para el servicio. Martínez se dio a la fuga y al día siguiente denunció en la Seo el robo de su vehículo.
A juicio del tribunal no hubo intención de causar lesiones o de atropellar a los guardias civiles.
