Cuéllar dice que el presidente le tiene manía

La negativa del presidente de la corrida de ayer de otorgar la oreja del sexto toro a Juan Cuéllar, que ya había cortado otra en su primer enemigo, tenía indignado al diestro. Era el único punto negro dentro de la alegría que le embargaba a él y a sus seguidores, que tomaron al asalto la habitación de su hotel y donde Cuéllar acusaba a Font de tenerle manía. "Es la tercera vez que me lo hace", afirmaba, "ya como novillero me ha perjudicado en dos ocasiones de esta forma. No debe querer que salga a hombros".El de Colmenar de Oreja ponía de relieve la diferencia con Espartaco, al que le dieron una oreja el martes con una gran polémica y menor petición, según Cuéllar, que añadía: "Me parece que a mí, como a todos los que empezamos, me era más necesaria, pero es más cómodo estar al lado de los poderosos que de los modestos". Valoraba muy positivamente su tarde, poniendo mayor énfasis en sus méritos frente al toro que cerró plaza. "No es que fuera fácil el de la alternativa", presumía, "pero nadie en la plaza pensaba que el último tenía faena y se la hice".

Cuéllar confía ahora en que este triunfo le sirva más que los que ha obtenido en el mismo escenario como novillero, sin que le valiesen para entrar en otras ferias. "Sería desmoralizante y casi para retirarse, lo que no pienso hacer", agregaba, "pero este triunfo es todavía mayor por ser en San Isidro, y sus repercusiones son enormes". De momento se conformaba con sustituír a Litri el martes en Aranjuez.

El presidente del festejo expuso al término del mismo sus razones para no conceder la oreja: "Era la que le abría la puerta grande, y eso es importantísimo en la feria y necesita muchísimos méritos, a los que en mi opinión no llegó Cuéllar". Al referirle la falta de unidad de criterio entre los distintos presidentes, máxime tras las reuniones que mantuvieron antes de iniciarse el abono, respondió: "Habrá que saber, y no lo voy a decir, si yo le hubiera dado o no el trofeo a Espartaco. En última instancia decide el criterio de cada uno de nosotros, y hoy decidí yo".

Enfermería portátil

Ayer fue presentada en el exterior de la plaza, por el cirujano jefe de la enfermería de Las Ventas, doctor Máximo García Padrós, la roulotte quirófano portátil utilizable en aquellos cosos que no dispongan de enfermería o ésta no reuna las condiciones exigibles. Esta enfermería portátil cuenta con todos los medios necesarios para realizar curas de urgencia y complicadas intervenciones quirúrgicas con todas las garantías y comodidades cubiertas.

Sus dimensiones son de 5,70 metros de largo, por 2,20 de ancho, y 2,35 de altura. Además del instrumental médico, dispone de aire acondicionado, generador de corriente y una cama y una litera separadas por una puerta plegable. A ella puede engancharse una ambulancia para el transporte de los heridos después de la operación.