Siempre hay una primera vez
Dejando aparte el encuentro de economistas de enero de 1937, S'Agaró no había sido hasta la celebración el pasado fin de semana de la cumbre de ministros de Economía de la Comunidad Europea (CE) para tratar de la armonización fiscal y la unión monetaria, escenario de ninguna reunión política o económica de trascendencia.En sus alrededores, en cambio, distintas localidades, como Lloret o Santa Cristina d'Aro, han sido lugar común de encuentros de economistas, desde las jornadas económicas que, en tiempos ya lejanos, organizaba el desaparecido Grupo Mundo, hasta las reuniones que organiza anualmente el prestigioso Círculo de Economía, en las que acostumbran a estar presentes los primeros espadas de la empresa privada y la Administración de España.
Un antecedente ligeramente similar se puede encontrar en la frecuente presencia en S'Agaró de Gaston Thorn, que tiene casa en la vecina localidad de Palamós, acompañado de bastantes de sus amigos, no pocos de ellos economistas, en las cenas de inicio de verano, que regularmente celebra y que sólo tienen como competidoras en presencia a las de Pere Portabella en Llofriu, también cercano.
