Desbloqueado el Plan Energético de Canarias, en el que se invertirán 185.000 millones
El Plan Energético de Canarias (Pecan), que será debatido en el Parlamento regional antes del próximo mes de junio, garantizará, con una inversión de 185.000 millones de pesetas, el consumo energético de las islas durante el próximo quinquenio, cuyo índice de crecimiento (11%) duplicó el año pasado la media nacional (5,3%). El plan, aprobado inicialmente hace dos años por el Gabinete del socialista Jerónimo Saavedra, ha sido desbloqueado ahora por el Ejecutivo que preside el centrista Lorenzo Olarte.Este respaldo se produce seis meses después de que el Parlamento se pronunciara a favor de la implantación del ciclo combinado de fuel y gas como fuente de alimentación de las dos futuras centrales de Tenerife y Gran Canaria.
La decisión de la Cámara legislativa, contraria a la opinión de la empresa Unión Eléctrica de Canarias, SA (Unelco), filial de la Empresa Nacional de Electricidad, SA (ENDESA), del grupo INI, que era partidaria del uso de carbón en sus dos futuras plantas térmicas, ha servido para salvar uno de los principales escollos con que tropezaba la puesta en marcha del Pecan. Unelco acaba de adquirir al Cabildo Insular de Tenerife 275.000 metros cuadrados en el polígono industrial de Granadilla, en dicha isla, sobre cuya superficie (ampliable en 200.000 metros cuadrados más) irá instalada una de las dos industrias citadas.
Parque energético
Con este plan, las autoridades autonómicas pretenden regular la producción, racionalización del consumo y distribución de petróleo, electricidad y energías renovables en las islas.
Entre las medidas contempladas en el mismo, elaboradas de acuerdo con los criterios del Plan Energético Nacional (PEN) y la normativa comunitaria en esta materia, está prevista la instalación de un parque energético integrado, en colaboración con la multinacional Westinghouse, y el desarrollo tecnológico de energías alternativas como la elóica, solar de baja y media temperatura, fotovoltaica, minihidraúlica y geotérmica, entre otras.
El desembolso de la inversión global, 184.650 millones de pesetas, será asumido por la iniciativa privada (180.390 millones de pesetas) y por el Gobierno autónomo (4.260 millones de pesetas) durante el período 1990-1995. Según Manuel Fernández, consejero de Industria y Energía del Gabinete regional, este esfuerzo económico puede ser amortizado en un plazo de 25 años.
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