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Habache quiere que los árabes se 'rebelen' contra EE UU

El Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), que desde la capital siria, Damasco, dirige Georges Habache, desea que el líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) Yasir Arafat, exija en la próxima cumbre de la Liga Arabe, que se celebrará en la ciudad marroquí de Casablanca, a todos los países árabes, que condicionen sus relaciones con Washington al reconocimiento por parte de la Administración de George Bush del Estado palestino.

En una larga conversación en su oficina de Damasco, bajo un retrato de Lenin, el líder de una de las más duras ramas disidentes de la OLP expone su postura ante la cumbre árabe, que el día 23 se inaugurará en Casablanca y que, entre otros asuntos, respaldará (con la probable excepción de Siria y Libia) las últimas decisiones adoptadas por Arafat.Habache, que a sus 64 años se define realista y rechaza los adjetivos de radical y terrorista -"condenamos los atentados", dice-, pretende asimismo que Arafat, en su calidad de presidente de la OLP, pida a Egipto que su vuelta al seno de la Liga Arabe se vea acompañada por la retirada de su embajador en Tel Aviv. "Si el presidente Hosni Mubarak desea adherirse a nuestra causa debe ordenar, después de año y medio de intifada, la retirada de su embajador".

"Créanme, hermanos o camaradas, así es como piensan las masas árabes", agrega sonriente y en perfecto inglés, recordando que cuatro han sido las ocasiones en que EE UU ha hecho uso de su derecho de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU a la hora de condenar la sangrienta represión israelí en Gaza y Cisjordania.

Habache reconce que gran parte de los palestinos alzados en piedras apoya, "por ahora", a la OLP, pues no todo el mundo ha llegado a la conclusión, como él, de que "las concesiones gratuitas de Arafat" no tendrán un final feliz. No obstante, admite ante un grupo de periodistas de diversos países que está dipuesto a reconocer su error "si se demuestra que Arafat está en lo cierto", es decir, si las concesiones del líder palestino desembocan en la convocatoria de una conferencia internacional auspiciada por la ONU que traiga consigo la retirada israelí de los territorios ocupados para dar paso a la instalación del Estado palestino, con capital en Jerusalén.

El FPLP, si bien reconoce al Estado de Palestina autoproclamado el pasado noviembre en Argel por el Parlamento de la OLP, no aprueba, al igual que Siria, el "reconocimiento incondicional" del Estado de Israel implícito en la resolución 422 de la ONU.

Habache cree que esta "innecesaria concesión" resta fuerza negociadora a la OLP. "Consideramos nuestro derecho a la autodeterminación como una cuestión de principios y no estamos dispuestos a hacer concesión alguna. Simplemente, deseamos que Palestina se convierta en un miembro más de la ONU. No somos ciudadanos de segunda. Y esto no se alcanzará sin luchar".

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El dirigente palestino considera que la CE, que durante este semestre preside España, ha dado últimamente "un giro positivo en favor de la causa palestina", y cree que ello se debe, "en un 80% o 90% a la intifada". Habache reconoce, entre risas, que discute largo y tendido con Arafat, sin que ninguno dé su brazo a torcer. Arafat siempre le pregunta: "¿Y qué otra cosa podemos hacer dada la situación en que se encuentra el mundo árabe?".

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