Kashogui planea aceptar la extradición y evitar la cárcel

El multimillonario saudí Adnan Kashogui, detenido desde el martes en la prisión regional de Berna, planea con su equipo de defensa solicitar voluntariamente la extradición a EE UU para salir antes de la cárcel. El Gobierno suizo, según Jörg Kistie, portavoz del Ministerio de Justicia y Policía, "accedería inmediatamente, pues así está contemplado en la ley". Ante el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York, que ha dictado su detención, Kasbogui podría obtener fácilmente la libertad condicional bajo fianza, lo que en su caso es imposible de lograr en Suiza. Los abogados estudiaban ayer la conveniencia de una conferencia de prensa con el propio Kashogui.

"La petición de extradición voluntariaes una alternativa que estamos estudiando, aunque no hemos rechazado el recurso ante el Tribunal Federal de Justicia", declararon ayer fuentes de la defensa de Adnan Kashogui, quien ayer cumplió su tercer día de estancia. en la cárcel de Berna, ocupada por 126 presos, en su mayoría preventivos como él. Un miembro del séquito del magnate saudí y el doctor que desdehace años le suministra curas periódicas de rejuvenecimiento, Augusto Gianolli, confirmaron ayer esta salida jurídica como la más rápida para obtener la libertad. Ambos aludieron a la lentitud del procedimiento suizo.El abogado suizo de Kashogui, Ralph Zlozeower, un profesional prestigioso, especializado en astintos inmobiliarios y financieros, se negó a ofrecer cualquier otra precisión. "No hay nada más que decir a la Prensa", fue la respuesta obtenida en su domicilio y en su despacho. Pero la tesis de la extradición por la vía rápida la refuerza la llegada el miércoles a Berna del abogado norteamericano de Kashogui, Frank Morse, encargado de calibrar el procedimiento más ágil ante el juez Naomi Buchwald, de Nueva York. Para hacer frente a la cuantía de la fianza no parece haber problemas.

Kashogui está implicado en el proceso abierto contra el ex dictador filipino Ferdinand Marcos, su esposa Imelda, varios colaboradores y el californiano Overseas Bank, acusado de actuar de intermediario en la venta de cuatro inmuebles situados en Manhattan y valiosos cuadros desaparecidos del Museo de Arte Contemporáneo de Manila, cuya propiedad reclama el Estado de Filipinas.

El portavoz del Ministerio Federal de Justicia y Policía de Suiza, Jórg Kistle, manifestó que la extradición voluntaria ofrece "más garantías de rapidez" y que "no es posible la libertad bajo fianza".

Por su parte, Kashogui dispone de 10 días para interponer recurso ante el Tribunal Federal suizo, cuya solución puede demorarse más de un mes, en caso de sentencia favorable. La segunda vía de solicitar la excarcelación por razones médicas no cuenta con bases razonables de éxito, pues "el estado de salud del detenido en el momento actual [por ayer] no ofrece ningún signo de anormalidad", según Alexander Tschátpát, el juez del distrito de Berna que ordenó su arresto. Este magistrado, de 37 años, afirma que su intervención ha finalizado con la ejecución de la orden de detención. "El caso", dice, "despierta mucha publicidad, pero me da poco trabajo".

El procedimiento ante la Administración Federal de la Justicia suiza se presenta poco favorable para Kashogui. Según el convenio bilateral, la pena aplicable en Suiza al delito por el cual Kashogui es reclamado en Estados Unidos debe superar un año de cárcel para que el Gobierno suizo esté obligado a conceder la extradición. Los artículos 144 y 145 del Código Penal suizo, aplicables al caso, prevén multas y penas de prisión de más de 10 y cinco años, respectivamente, cuando el inculpado "haya adquirido, recibido en donación o en prenda, disimulado o ayudado a negociar un bien que sabía o debía presumir que había sido obtenido ilegalmente", lo cual parece ser el caso de los bienes reclamados por Filipinas al matrimonio Marcos.

En medios financieros suizos ha surgido un cierto malestar por la celeridad con que se ejecutó la orden de arresto. Suiza, tras los casos del italiano Licio Gelli, el libanés Khalil Gattas y el saudí Adnan Kashogui, parece cada vez menos un lugar seguro para los grandes financieros perseguidos por lajusticia. "Esta es la vez en que se ha aplicado más rápidamente el convenio de extradición con Estados Unidos", afirmó ayer un banquero. Kashogui llegó al hotel de Berna el lunes pasado. Esa misma noche, la policía federal suiza recibió la petición de arresto y Kashogui fue detenido a las 10 de la mañana del martes. Después de una pequeña negociación entre el juez y el abogado, fue llevado a la cárcel escoltado por dos policías. No hubo necesidad de esposarlo.