La CE decidirá en Madrid abolir las fronteras interiores
El presidente del Gobierno español, Felipe González, anunció ayer ante el Parlamento Europeo que en la cumbre de Madrid se alcanzará un compromiso sobre la supresión de fronteras en la Comunidad Europea (CE). " cita en la capital de España los días 26 y 27 de junio, que pondrá fin a la presidencia española de la CE, será importante también para decidir sobre grandes temas, como la unión monetaria, la armonización fiscal y la dimensión social. González ratificó una vez más que en el proyecto de construcción europea "España, con un consenso político muy sólido, quiere participar a fondo".
En un discurso de 32 páginas, con claro matiz político y centrado en los grandes temas que determinan la integración europea, Felipe González dio un repaso al trabajo de la presidencia española durante el presente semestre.En este balance a mitad de mandato, más que los avances logrados hasta el momento destacan los compromisos asumidos por el presidente para la cumbre de Madrid, que se celebrará los días 26 y 27 de junio. En ella, según dijo, las principales reformas pendientes tendrán un debate profundo y una respuesta.
En primer lugar, la libre circulación de personas y la supresión de las fronteras en la CE. "Se ha trabajado a buen ritmo", dijo González, "y espero que en Madrid tendremos sobre la mesa un programa serio para la supresión de las barreras risicas, con un inventario de los obstáculos existentes y una presentación de los elementos para su remoción, con un calendario necesariamente ajustado".
Para el presidente del Gobierno, las fronteras interiores no son elementos decisivos en la lucha contra la delincuencia organizada, el terrorismo o el narcotráfico. "Es más importante la cooperación judicial y la armonización de normas penales que permitan la creación de un espa.cio jurídico europeo", afirmó entre aplausos. Hizo también un llamamiento a la cooperación entre las autoridades de los Estados miembros y la Comunidad Europea para este objetivo.
La unión monetaria
Sobre la unión económica y monetaria, sin duda el tema estrella de la cumbre de Madrid, Felipe González aseguró que, "sin necesidad de prejuzgar ningún resultado final, podría pensarse, en el horizonte de 1992, en un reforzamiento del mecanismo actual de cambios y su aplicación a todas las monedas de la Comunidad".
El presidente del Gobierno español sugirió también la coordinación entre las autoridades financieras y monetarias de los Estados miembros, pero no avanzó nada sobre un posible compromiso. Sin embargo, por razones de tiempo, "no es posible una decisión técnica sobre la unión monetaria, como tampoco es posible para esa fecha la entrada de la peseta en el Sistema Monetario Europeo".En su intervención ante los eurodiputados, el presidente del Gobierno español se extendió sobre la cohesión económica y social y la asignatura pendiente de la dimensión social europea, tema que aglutinó las mayores preocupaciones de los eurodiputados en el turno de preguntas. Felipe González expresó su confianza de que en la cumbre de Madrid "podamos avanzar en la formulación de una declaración sobre los derechos sociales en la Comunidad como base para un desarrollo progresivo de esos derechos en el marco comunitario".No faltó tampoco la preocupación por el retraso de la armonización fiscal y las proftindas diferencias que dividen a la CE en este punto. A pesar de la obligación de adoptar una decisión sobre la fiscalidad del ahorro antes de¡ 30 de junio, "nos encontramos alejados todavía de una solución satisfactoria". Éste, precisó el presidente, es un imperativo del mercado único que hay que cumplir aunque sea muy costoso, entre otras cosas porque "sería absurdo premiar al evasor fiscal y castigar al modesto ahorrador". Insistió en que la presidencia española trata de acordar un modelo común aceptable para la armonización del IVA a pesar de las resistencias de varios países.
El resto de la intervención fue un encendido llamamiento en favor de la participación de los ciudadanos comunitarios en las elecciones locales de su lugar de residencia y el establecimiento de libre residencia para estudiantes y jubilados, asunto que España tiene sobre la mesa del Consejo de Ministros.La vía para que "e,merja unaauténtica ciudadanía europea" fuq subrayada con su visión de una Europa de los ciudadanos, que "no puede reducirse a la emisión de sellos y pegatinas con la palabra Europa".
Reforma institucional
La "Europa con rostro humano, competitiva y a la vez solidaria, acaso exija una reforma institucional en la CE, y es necesario que el próximo Parlamento que salga de las urnas lleve a cabo la reflexión para adaptar la Comunidad a las exigencias del siglo XXI". Será la legislatura siguiente a la próxima la constituyente de un Parlamento Europeo que necesita aún conquistar poderes legislativos.
En el capítulo de los logros conseguidos por España hasta elecuador de su presidencia, Felipe González citó las directivas sobre seguridad e higiene en el trabajo, el esfuerzo en materia de medio ambiente, el nacimiento de la Europa audiovisual, los programas de investigación aprobados, la prohibición- de exportar productos químicos utilizables con fines bélicos y especialmente la actividad exterior con el nuevo modelo por diseñar para las relaciones con la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA), el diálogo con Europa del Este y la "ventana para la paz" abierta en América Central. Con repecto a la deuda exterior, se remitió una vez más a la cumbre de Madrid para "encontrar una fórmula de entendimiento entre los doce para preparar una actuación internacional en este campo".
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