Medina y Martínez Torres mantuvieron un tenso careo en la Audiencia de Madrid

El comisario general de Información, Jesús Martínez Torres, y el inspector Juan José Medina mantuvieron ayer un tenso careo en el juicio que se celebra en la Audiencia Provincial contra Medina por un delito de infidelidad en la custodia de documentos. El inspector está acusado de haber sustraído de la Brigada de Interior, en la que estaba destinado, una treintena de documentos confidenciales referentes a investigaciones a partidos políticos y a determinadas operaciones policiales. El fiscal pide dos años de cárcel y 30.000 pesetas de multa para Medina.Martínez Torres, que declaraba como testigo, negó que el juez Viñas, de Roma, hubiese solicitado en 1983 que se investigara la procedencia de una metralleta Ingram, utilizada por el terrorista ultra Pier Luigi Concutelli para asesinar al juez Occorsio. El arma fue vendida a la policía española, y personas desconocidas la desviaron al terrorismo negro italiano.

Como Medina había manifestado que fue Martínez Torres quien le había entregado el télex y que después le había dicho telefónicamente que era mejor que se olvidara del asunto, porque era una cuestión ya pasada, el presidente del tribunal accedió al careo solicitado por la defensa.

Medina: "Usted nos dio una copia del télex recibido de Italia. Se lo entregó a Baniandrés en mi presencia".

Martínez Torres: "Nunca ha estado con. Baniandrés en mi presencia, porque nunca le he recibido a usted en mi despacho".

M: "Sí nos recibió, y después me llamó para que lo dejara...".

M.T: "Nunca he hablado con usted por teléfono. Usted está mintiendo".

M: "El que miente es usted".

M.T: "Sí eso era competencia del Servicio de Información Exterior y no de la Brigada de Interior...".

M: "El télex ha sido publicado varias veces".

M.T: "¿De qué fecha es?".

M: "Se recibió en el mes de abril de 1983".

M.T: "No recuerdo'.

M: "Antes decía que no existía y ahora que no recuerda".

M.T: "Yo no lo he recibido".

M: "Nos lo entregó a Baniandrés y a mí".

M.T: Habrá qué, preguntar a Baniandrés, a ver...".

El defensor de Medina, Juan Lozano, solicitó la suspensión del juicio para que declarase el comisario Baniandrés, pero el presidente del Tribunal, Félix Alfonso Guevara, no accedió a la suspensión. En su declaración, Medina había afirmado que su destitución y la de Baniandrés se produjeron a raíz de la investigación realizada sobre la Ingram.

Martínez Torres afirmó que la razón de las destituciones fue la falta de rendimiento en la época.

En la sesión de tarde, se produjo otro careo entre Rafael del Río, ex director general de la Policía y el sindicalista José Antonio Rodríguez. Éste acusó a Del Río de haber mencionado en una ocasión que expedientaría a Medina si se publicaba un artículo en una revista en el que se relacionaba a un cuñado de Rafael Vera, secretario de Estado para la Seguridad, con la distribución de los fondos reservados.