"La flecha ha sido lanzada", asegura Alí Jamenei

"La flecha ha sido lanzada hacia la meta y ahora viaja hacia su objetivo", declaró ayer en conferencia de prensa en Belgrado el presidente iraní, Alí Jamenei, en referencia a la amenaza de muerte pronunciada por el imam Jomeini contra del escritor Salman Rushdie. El presidente iraní dijo que el escándalo Rushdie no tiene solución, que algunos Gobiernos "han defendido ilógicamente el libro", y que la defensa de Rushdie "forma parte de la política de los países dominantes". Al criticar a Occidente, Jamenei (que ayer viajó a Rumanía) preguntó "si era posible que aquellos quienes defienden el derecho a la libertad de pensamiento insulten a mil millones de musulmanes"."Ellos confunden la libertad de expresión con la libertad de insultar", afirmó. El presidente iraní desacreditó a la Prensa occidental por lo que calificó de "información falsa" acerca de sus discrepancías con el ayatolá Jomeiní cuando declaró que Salman Rushdie podría ser perdonado si se disculpara.

A las preguntas de EL PAÍS de quién había leído Versículos satánicos y determinado que el libro era ofensivo para los musulmanes, Jamenei respondió: "No era necesario leerlo, todo el mundo lo había leído". Sobre las relaciones entre Irán y la CE, el presidente iraní contestó: "Nosotros no sacrificaremos nuestros principios en nombre de las necesidades cotidianas", en referencia a la necesidad de la reconstrucción de Irán, donde la ayuda de las empresas europeas es necesaria.

Reiterando múltiples veces que los países dominantes imponen su política, Jamenei advirtió que "la retirada del personal diplomático [de la Comunidad Europea] tendrá sus consecuencias", aunque no especificó de qué tipo.

"Decreto de Dios"

[En Teherán, el imam Jomeini, máximo líder íraní, dijo ayer que las sanciones económicas contra Irán "no impedirán la ejecución del decreto de Dios sobre el blasfemo escritor Salman Rushdie por difamar las santidades del islam", informa Efe.

En un mensaje difundido por Radio Teherán y dirigido a las autoridades religiosas, teólogos y líderes de Irán, Jomeini aseguró que "la arrogancia occidental no nos obligará a retirarnos y olvidar el decreto de Dios".

El líder iraní dijo que el caso Rushdie es "un trabajo planificado para exterminmar al islam". Jomeini criticó también a los "liberales" de su país "vendidos al exterior" que mientras él viva no permitirá que el Estado iraní caiga en sus manos. "No voy a permitir a los hipócritas destruir el islam y a su pueblo", afirmó.]