Nicolás Redondo acusa al Gobierno de haber "quemado" las posibilidades de diálogo social

P. JARA/ J. MÉNDEZ, El secretario general de UGT, Nicolás Redondo, acusó ayer al Gobierno de "haber quemado, para mucho tiempo las posibilidades de diálogo social" y exigió al presidente González que admita la autonomía del sindicato y que "no intente, desde el aparato del partido y del Gobierno, desestabilizar a la UGT". Por su parte, el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Manuel Chaves, auguró ayer en Alcalá de los Gazules (Cádiz) que el Gobierno "seguirá teniendo problemas de relación con la UGT", aunque puntualizó que el Ejecutivo sigue abierto a las negociaciones para lograr una concertación social.

Nicolás Redondo, secretario general de la Unión General de Trabajadores (UGT) valoré en Cáceres la situación derivada del fracaso en las negociaciones sobre concertación y a la oferta realizada por el presidente del Gobierno, Felipe González. González había señalado el pasado viernes que los sindicatos .aún están a tiempo" de aceptar los 369.000 millones de pesetas ofrecidos por el Ejecutivo para temas sociales si garanti2:an la paz social.El secretario general de UGT afirmó que "la paz social siempre corresponde a una política social, y no hay paz social cuando la política social del Gobierno es inexistente, ineficaz y ha fracasado de manera absoluta. Entonces se producen tensiones y conflictos, y la Única forma de solucionarlos es llegando a acuerdos".

A juicio de Redondo, seguirán habiendo conflictos y tensiones hasta que no se produzca un giro social, dificil de realizar, "mientras el Gobierno siga descansando como hasta ahora exclusivamente en los empresarios que, dentro de su lógica, tienden a limitar e impedir cualquier reorientación que haga que la actual política económica.

El secretario general de UGT imputó el fracaso de las negociaciones al Gobierno "que no ha hecho ningún esfuerzo para poder llegar a un acuerdo que demandaba el 90%. de la población de nuestro país", afirmando que por parte del Ejecutivo ha habido "una obcecación en los comportamientos que han hecho inviable el acuerdo". Nicolás Redondo interpretó este planteamiento en "la lógica del trastocamiento de papeles, con un Gobierno de izquierda que gobierna hacia la derecha y siempre tomando determinaciones que coinciden con los intereses de la derecha económica".

El líder ugetista manifestó que los sindicatos "no van a cejar en sus reivindicaciones" ni las van "a rebajar", porque "no son caprichosas" y podrían "ser asumidas a nivel presupuestario en un contexto económico determinado".

Por otra parte, Redondo lamentó una inminente "negociación colectiva que puede ser tensa" y señaló que "ha habido un principio de acuerdo sobre el 12 de mayo", no desechando manifestaciones antes de esa fecha.

"Problemas con UGT"

Por su parte, el Ministro de Trabajo, Manuel Chaves, auguró la continuidad de los problemas entre el PSOE y la UGT durante su visita a Alcalá de los Gazules, la localidad gaditana en la que fue recibido por un, grupo de manifestantes, reunidos frente a la Casa del Pueblo.

Según Manuel Chaves la oferta presentada recientemente por el pr( sidente del Gobierno, Felipe González, "no es un ultimátum" a los sindicatos, y reiteró que "hay un problema que es el que te ha impedido que se llegara a acuerdo, y es si se quiere o no se quiere efectivamente negociar".

El ministro añadió que algunas de las reivindicaciones sindicales ''son desmesuradas y no entrar dentro de los límites presupuestarios, y de las posibilidades económicas de este país, por lo que no pueden ser aceptaclas con el coste económico en las que han sido cuantificadas".