El Colegio de Médicos de Madrid exculpa a la clínica de La Zarzuela de negligencia

El Colegio de Médicos de Madrid ha exculpado de negligencia a la clínica privada madrileña de La Zarzuela de la muerte de Antonio Sanz González, de 17 años, por infección meningocócica. José María Valoria, presidente de la comisión deontológica, confirma que el joven fue inicialmente diagnosticado y tratado de gastroenteritis, pero lo ve irrelevante: "Era una de las mil cosas que podía tener por los síntomas". Esta comisión ha investigado 105 denuncias desde abril de 1988. En ninguna dio la razón al reclamante.

El pasado 6 de noviembre, Antonio Sanz fue llevado a las 7.30 horas a la clínica de La Zarzuela. Vomitaba y tenía fuertes dolores en la cabeza, nuca y piernas, y 41,5 grados de fiebre. El doctor Silvio Corrales, se inclinó a creerlo una gastroenteritis, diagnóstico del que no discreparon la doctora Estebarán ni el especialista en enfermedades infecciosas Fernando Martínez Luengas.Los padres, a mediodía, por recomendación de los médicos y bajo advertencia de que regresaran si empeoraba, se llevaron a casa a Antonio, con iguales dolores y fiebre. Al advertir que Antonio tenía cuajarones de sangre en los ojos y manchas marrones en la piel, regresaron a la clínica a las 19 horas. Allí, le practicaron la punción lumbar y se descubrió y medicó una "meningococemia fulminante con meningitis de muy mal pronóstico". El joven murió horas después.

El dictamen estima que cuando el joven ingresa por primera vez "no presentaba datos clínicos reveladores de enfermedad meningocócica". "La situación clínica era buena, la exploración fisica absolutamente normal y en la analítica sanguínea, sólo se contemplaba un ligero aumento de glóbulos blancos" y se agrega que "una punción lumbar, hubiese carecido de indicación correcta y su examen bioquímico hubiese sido tan normal como lo fue en la punción efectuada posteriormente"

Los denunciantes discrepan: "¿Cómo se puede decir que su situación era buena, con 42 de fiebre y grandes dolores? ¿Cómo saben qué hubiera revelado una punción, si no la hicieron?". El dictamen declara "profesionalmente correcta" la actuación de los facultativos.

Valoria ve "lógico" que las 105 denuncias contra médicos estudiadas por esta comisión deontológica desde que él la preside -abril de 1988-hayan sido resueltas de forma favorable a los facultativos: "Tienen graves defectos técnicos porque están realizados por profanos en medicina. En cuanto las examina un profesional se ve que carecen de fundamento. Es como si usted criticara el Derecho Naval británico: metería la pata".

Observación hospitalaria

Valoria cree irrelevante que el joven fuera inicialmente diagnosticado y tratado de gastroenteritis. "Era una de las mil cosas que podía tener por los síntomas que mostraba al principio. Cuando la enfermedad eclosionó no había nada que hacer, y tampoco habría servido haber acertado y adelantado ocho horas el diagnóstico".Y agrega que "ante un caso así siempre es preferible mantener al paciente en observación hospitalaria, pero a veces no se hace por falta de camas o, como en este caso, porque el paciente vivía cerca de la clínica". Valoria, vicepresidente del colegio madrileño, cree correcto que se desoyera la insistente sugerencia de la madre sobre una posible meningitis: "El médico no tiene por que creer lo que diga un profano, aunque en este caso sí acertó".

Los familiares, que creen "parcial" el veredicto del colegio, ante el que denunciaron el caso, anuncian que acudirán a los tribunales. José Antonio Muñoz Calero, director de esta clínica estima que el dictamen esclarece la "verdad científica", y cree que será corroborada por cualquier tribunal.

Por otro lado, una portavoz de la Unión de Consumidores de España ha criticado el acuerdo de su sección madrileña para tramitar a través del colegio de médicos de esta región las denuncias contra médicos. 'Es absurdo. No se puede entregar denuncias a quien es juez y parte. Hay que presentarlas ante los juzgados. Y para que no se aleguen defectos técnicos les daremos asesoramiento de forenses".