Bienvenido, doctor Angeloz

En estos momentos, nuestra patria, Argentina, sufre los embates de quienes practican la intolerancia y la soberbia y desechan a la democracia como sistema por considerarla imperfecta, pretendiendo como solución el perfecto sistema de la dictadura, del universo cerrado y sin disenso, del Gobierno sin oposición, de la sociedad militarizada, de los campos de concentración.En estos momentos también se pretende olvidar que la democracia se construye y se asienta en ideas claras y rectoras, fuertemente ancladas en las bases de la cultura cívica y de la grandeza de ánimo para que ni la cobardía ni la ignorancia favorezcan los vientos que a menudo la derrumban.

Es necesario llevar adelante cosas tan simples pero difíciles como lograr la eficiencia en la Administración pública, la modernización de las estructuras del Estado, el fortalecimiento del federalismo y de las autonomías municipales.

Hemos ganado ya la paz, estamos gozando ya los frutos de la convivencia y la tolerancia, hemos conquistado la libertad y adquirido el rango de sociedad civilizada.

La reinserción de Argentina entre las naciones democráticas exige también producir más y mejor, y requiere una nueva re definición del papel del Estado en la economía, superando la visión maniquea que sólo admite a los privatistas o estatistas a ultranza, designando a los buenos y a los malos según el caso.

Debemos lograr que el Estado responda a su definición; que funcione cada vez mejor y más democráticamente; que garantice la recuperación de la eficacia y a la vez aliente prácticas de intervención y de participación ciudadanas, y que no reproduzca a nivel político las desigual dades que pretende combatir en la sociedad civil y en el sistema económico.

En resumen, doctor Angeloz, el reto de nuestro país consiste en lograr una racionalización y democratización de la vida pública, entendiendo que es posible luchar contra una injusta distribución del poder, promover condiciones favorables al ejercicio de la libertad y procurar la igualdad.

Como gobernador de la provincia de Córdoba, usted ha sido inspirador político y hombre de acción, por lo que depositamos en usted nuestra confianza y le damos la bienvenida.-