España reducirá los carros de combate por el desarme en Europa

Varias decenas de los 838 carros de combate que posee el Ejército de Tierra español deberán ser eliminadas si se cumplen las previsiones, tanto de la OTAN como del Pacto de Varsovia, sobre la reducción de armas convencionales en Europa. Expertos españoles de los ministerios de Defensa y de Asuntos Exteriores sostienen que, con toda seguridad, España habrá de reducir el número de carros de combate y de vehículos blindados armados en una cifra que puede alcanzar a varios centenares de ese tipo de vehículos.

Los mandos del Ejército mantienen que no debe realizarse reducción alguna porque las misiones del mismo -las aliadas y las propias- exigen al menos una infraestructura como la actual.Unos; 80.000 carros de combate están concentrados actualmente en Europa, y la OTAN ya ha propuesto reducir su número en unos 40.000, la mayor parte de ellos del bloque del Este. La próxima conclusión en Viena de la Conferencia sobre Seguridad y Cooperación en Europa abrirá el camino para que ambos bloques negocien una reducción equilibrada de las armas convencionales.

La OTAN intentará que el mayor porcentaje posible de carros de combate permitidos esté en los países más próximos a las naciones del Pacto de Varsovia, por lo que será difícil para el Ejército de Tierra defender la hipotética necesidad de que en España haya un elevado número de los mismos.

De esta forma, los expertos españoles coinciden en afirmar que el Ejército de Tierra español se verá afectado por primera vez en un proceso de desarme internacional. Esta disminución es usada ya por los partidarios de reducir más dicho Ejército, quienes ven en esta ocasión un buen motivo para que la fuerza operativa del Ejército esté centrada en la Fuerza de Intervención Rápida (FIR). El empleo de ésta en las misiones elegidas por España constituirá la principal aportación militar española a la OTAN.

Ceuta y Melilla se hallan fuera del área afectada por las futuras negociaciones sobre armas convencionales, por lo que el Ejército español puede decidir el traslado a estas ciudades de los carros que deba reducir en la Península.

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