Consejos escolares

En la regulación del proceso electoral para los consejos escolares, emanada del Ministerio de Educación y Ciencia, existen, a mi juicio, tres defectos graves:

1. Que, al admitir que se presenten candidaturas hasta 48 horas antes de que se produzca la votación, no da lugar a que los padres candidatos puedan presentarse al cuerpo social electoral; por tanto, se votará a ciegas o a las personas que ya conozcan por pertenecer a la junta directiva de la asociación de padres de alumnos (APA).

2. Que se discrimina a los candidatos independientes respecto a las papeletas del voto, ya que pueden figurar en papeleta aparte los candidatos de la APA y en otra han de constar todos los demás, con lo que nuevamente el sistema favorece a los presentados por la asociación de padres.

3. Que no hay ninguna forma establecida para regular la promoción de candidatos al consejo escolar dentro de las asociaciones de padres de alumnos, resultando de ello que su presentación se convierte en una decisión personal de los integrantes de la junta directiva, y de esta manera se convierte en una elección de segundo grado.

Las asociaciones de padres de alumnos han realizado una aportación histórica para la democratización de la escuela, pero no puede esgrimirse la historia para impulsar una normativa electoral que privilegie a unas APA en decadencia, y que poco tiene que ver con la igualdad legal que, como principio básico, deben gozar todos los candidatos en unas elecciones libres y democráticas.

Con esta normativa proteccionsta, las APAS han elegido un camino equivocado para reforzar su presencia en el ámbito escolar. Son acciones como ésta las que demotivan al cuerpo social y desacreditan. a las asociaciones de padres de alumnos como líderes democráticos.-