Cocaína en el Parlamento italiano

Los diversos partidos que forman el Gobierno italiano, presidido por el democristiano Ciriaco de Mita, no consiguen ponerse de acuerdo acerca de la nueva ley sobre la droga. Sin embargo, el responsable de prensa de la Democracia Cristiana, el diputado Clemente Mastella, ha revelado que en el Parlamento italiano -entre diputados y senadores- "corre la cocaína". Según Mastella, los que la usan -y subraya que no son pocos- lo hacen "para darse un empujón, para salir de una frustración", ya que, afirma el diputado, Ia vida política no es tan alegre como se puede imaginar. Cuando el éxito se acerca y de repente huye hay quien piensa que la droga puede ayudarle a sostenerse en pie".

Mastella asegura que se drogan más los diputados procedentes del Norte que los del Sur, y más los que "nacen con suerte" que los que han tenido que "pedalear duro para llegar al Parlamento". Quienes menos usan la cocaína son los diputados de origen "cristiano", segun Mastella, "porrazones culturales y morales, que nos hacen ver la droga como más pecaminosa que el sexo".También el diputado radical Massimo Teodori, que ha pedido un análisis antidoping para los miembros de la Cámara, asegura que una buena parte de los diputados usa la cocaína "corno una práctica social". Curiosamente, los de izquierdas utilizan "marihuana y hachís" para contrarrestar sus frustraciones, mientras que la cocaína "es más de derechas", ha afirmado por su parte el diputado neofascista milanés Tommasso Staiti.

Felice Borgoglio, diputado socialista, ha asegurado que "también en la dirección de mi partido hay quien hace uso de la cocaína", revelación que parece haber impulsado al secretario del partido, Bettino Craxi, a levantar la gran polvareda que ha provocado su petición de una ley que castigue no sólo a los vendedores, sino también a los consumidores de droga. Craxi es riguroso: se refiere a todas las drogas, sin excluir la marihuana o el hachís, ya que, según el líder socialista, la droga blanda "es el primer paso hacia la dura, digan lo que digan".

La pregunta que se hacen algunos observadores de la vida política italiana, tras la revelación de que "la cocaína corre en el Parlamento", es si ello no será la causa del gran caos y las polémicas interminables que a veces se dan en Montecitorio. Pero Mastella responde: "No, la sobreexcitación del debate político italiano no es efecto de la droga, ya que aún no somos gente de laboratorio".

Las revelaciones de Mastella han levantado un avispero y no pocos miembros de Montecitorio han pedido que intervenga la Presidenta del Parlamento, Nilde Jotti "ante la campaña de difamación en curso contra el Parlamento", como ha dicho la diputada católica Tina Anseimi.

Pero a las revelaciones de Mastella y de otros diputados se han sumado las de un personaje de indiscutible prestigio como es el diputado Alfredo ReichIin, de la direccion del partido comunista, quien ha afirmado: "Sabernos muy bien quienes son los diputados que usan la droga dura, son los jovenes rampanti (trepadores) en busca de carrera". Mastella ha replicado que no entiende el por qué de tanta hipocresía cuando se sabe que ha habido incluso diputados que han muerto a causa de la droga, como el socialista Antonio Canepa, de 43 años, hallado muerto en su habitación de Genova con la jeringa aún caliente de heroína.

Algunos diputados piensan que sería mejor no hablar de ello ya que, afirman, "nuestros hijos se escandalizan", mientras que el obispo Riboldi ha declarado que el escándalo no es sólo para los jóvenes, sino también para los mayores.