Obispos y empresarios logran que sea fiesta el día de la Inmaculada

El Gobierno ha decidido declarar festivo el jueves 8 de diciembre, día de la Inmaculada, cediendo a la presión de la Iglesia y de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). La decisión fue notificada ayer en la comisión mixta técnica Iglesia-Estado. Según el secretario de la Conferencia Episcopal, Agustín García Gasco, la causa última de este cambio "no es la presión de los obispos, sino también el clamor del pueblo cristiano, donde se incluyen los empresarios". La segunda semana de diciembre tendrá sólo tres días laborables.

El vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, había manifestado el pasado jueves que el Ejecutivo no tenía ningún inconveniente en declarar no laborable el día de la Inmaculada si los empresarios daban el visto bueno. "No va a ser el Gobierno", dijo, "quien tenga que preocuparse por los intereses del aparato productivo si sus representantes no están en esta actitud". Esas declaraciones hicieron dar por seguro el cambio de la festividad del lunes día 5 de diciembre, fecha en que la había fijado el decreto del Ministerio de Trabajo, al jueves 8, que se corresponde con la celebración eclesiástica.El traslado inicial de la fiesta pretendía evitar que se produjese un puente continuado, pues el martes 6 de diciembre no es laborable por celebrarse el Día de la Constitución. Tal como ha quedado finalmente el calendario, en la segunda semana de diciembre serán festivos el martes y el jueves.

El Ejecutivo indicó en un comunicado que ha tenido en cuenta la valoración del hecho de que los destinatarios de una medida planteada por el Gobierno como racionalizadora del régimen de fiestas laborables en 1988 han planteado públicamente su opinión de que no se derivarían perjuicios para ellos en el caso de no ponerse en práctica tal medida en este año".

Las agencias de viajes catalanas han mostrado su preocupación por las posibles pérdidas económicas que comportará la anulación de los viajes contratados para un puente de cuatro días si la Inmaculada se celebra el día 8 en lugar del 5, según informó Ana Rivero, gerente de la Asociación Catalana de Agencias de Viajes (ACAV).

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