La madre de David Owen critica la aplicación de la justicia en Cataluña

ENVIADO ESPECIAL

Raquel Owen, madre del fotógrafo estadounidense Conan David Owen, condenado a seis años de cárcel en España por narcotráfico y trasladado el pasado lunes a su país, criticó ayer a la Justicia española y en especial "el pésimo trato judicial que se ha dado a mi hijo en Cataluña". La madre del detenido declaró a EL PAÍS, en su domicilio de Anandale (Virginia), que "Barcelona no es España, hay muchas diferencias entre los catalanes y el resto de España, estoy segura de que si Conan hubiese sido detenido en Madrid hubiéramos conseguido el traslado o la libertad mucho antes, pero en Barcelona aplicaron la ley de forma muy rigurosa".

La madre del fotógrafo dijo de la Justicia española: "No es retrógada, esa no es la palabra, pero sí que es muy arcaica, porque lo que pasó en el año 1 sigue siendo lo que vale hoy". "Además, los catalanes exageran esa deficiencia legislativa", añadió. Raque¡ Owen criticó especialmente el hecho de que el tribunal que juzgó a su hijo en Barcelona no quisiera dar por válidas las declaraciones del narcotraficante Jorge Barahona, que exculpó al fotógrafo ante un tribunal de Virginia. Barahona se responsabilizó de la colocación en la maleta de Owen de los dos kilos de heroína que localizó la Guardia Civil en el aeropuerto de El Prat cuando llegó a España procedente de Chile.

La madre de Owen, de 46 años, tiene nacionalidad hondureña, trabaja desde 1961 en el Banco Mundial, en Washington, y posee estatus diplomático. Para ella, "la prensa española se empeñó en hacer pasar a Conan por agente secreto y esa falsedad nos ha perjudicado notablemente". La padres del fotógrafo dicen haber gastado unos 50.000 dólares (seis millones de pesetas) para conseguir el regreso de su hijo a EE UU.

"Después de los 19 meses de encarcelamiento de Conan tanto mi esposo [Ernest, de 56 años], como yo estamos desgastados mental y económicamente, pero contentos de que Conan esté en nuestro país", dijo su madre, quien se declaró "esperanzada" de que la justicia norteamericana conceda la libertad provisional a su hijo.