Un guardia civil denuncia y agrede a un ATS tras acusarle de la muerte de su esposa
El guardia civil Francisco Vilches Godoy ha presentado una denuncia por negligencia profesional contra un ATS del hospital San Juan de la Cruz, de Ubeda (Jaén). Vilches responsabiliza al ATS, cuyo nombre no ha sido facilitado, del fallecimiento de su esposa, Rosa Sánchez Fernández, de 35 años de edad.
Por su parte, el hospital y el ATS han presentado otra denuncia contra el guardia civil por agredir al enfermero. Vilches Godoy, al enterarse del fallecimiento de su esposa, la emprendió a puñetazos con el ATS y le fracturó dos costillas.El guardia civil, destinado en el destacamento de Tráfico de Baeza, ha declarado que "le pegué puñetazos hasta que me pararon", actitud que justifica en que el enfermero desatendió los requerimientos de la familia para que alertase al médico de guardia del mal estado de salud de su esposa. Según la versión del guardia civil, los hechos se iniciaron el pasado 28 de agosto, cuando su esposa ingresó en el hospital ubetense aquejada de una afección intestinal, y el médico informó a la familia de la necesidad de operarla.
La intervención quirúgica, que resultó un éxito, la practicó el doctor Restituto Moya en la mañana del día 29. No obstante, hacia las tres de la madrugada del 30 de agosto al 1 de septiembre, Rosa Sánchez empezó a quejarse de fuertes dolores y problemas respiratorios.
Según Vilches, el ATS se negó insistentemente y en reiteradas ocasiones a llamar al médico, e incluso contestó con "malos modos la primera vez que lo llamamos".
Sobre las tres de la madrugada, y ante el aumento de dolores, se puso a la enferma un tranquilizante, indicando el ATS que su estado era normal.
Posteriormente, la enferma volvió a sugerir a su marido ser atendida por el médico de guardia, cuestión que Vilches trasladó al enfermero, quien respondió: "yo estoy capacitado para decidir este tipo de temas y no molesto al médico a esta hora por una tontería", relató el guardia.
Vilches discutió con el enfermero hacia las seis de la madrugada, cuando obtuvo una nueva negativa para que el médico reconociese a su esposa, que ya en ese momento empezaba a tener sudores fríos. A las ocho de la mañana se produjo el cambio de turno. La enfermera que relevó al ATS, al comprobar el estado de Rosa Sánchez, avisó inmediatamente al médico, quien minutos después sólo pudo certificar el fallecimiento. La agresión se produjo cuando el guardia civil, informado del desenlace, entró en la habitación donde se encontraba el cadáver de su esposa y vio en ella al ATS.
Rosa Sánchez fue enterrada anteayer en Jódar (Jaén), y deja tres hijos de edades comprendidas entre los tres y los 16 años. Francisco Vilches ha declarado que "lo único que pretendo con la denuncia es que esto no vuelva a suceder".
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