La dieta escolar española contiene exceso de grasas y proteínas

España corre el riesgo de convertirse "en uno de los países más viejos de Europa", según han advertido los pediatras españoles participantes en un congreso nacional celebrado recientemente en Zaragoza. Los más de 1.600 pediatras asistentes a la convención han expresado su preocupación por el descenso de la natalidad mantenido durante el último decenio, que cifran en 45.000 menos al año.El nuevo presidente de la Asociación Española de Pediatría, el profesor de Santiago de Compostela José Peña, manifestó que "el descenso de la natalidad es una verdadera catástrofe. En el plazo de 25 años los 650.000 niños que nacían anualmente en nuestro país han pasado a 450.000. Las consecuencias serán tremendas".

Los profesionales de la pediatría han estudiado en este congreso un amplio temario relacionado con la asistencia y la problemática de la infancia. Denuncian el exceso de grasas y proteínas de la dieta escolar española y recomiendan a los profesionales que valoren los progresos recientes en oncología infantil, dado que "el cáncer infantil es la segunda causa de muerte entre uno y 15 años y muestra una incidencia creciente".

Prevenir accidentes

En otra de las ponencias se ha llegado a la conclusión de que "casi el 30% de los adolescentes españoles llevan camino de convertirse en adultos marginados". En nuestro país existe un grupo crítico, de 300.000 a 600.000 adolescentes, "que no poseen ninguna cualificación, con escasos. recursos económicos y un medio familiar conflictivo, que viven en suburbios degradados".

La sección de pediatría social presentó varias comunicaciones sobre "Los accidentes infantiles como problema de salud". Se llegó a la conclusión de que los pediatras deben transmitir a los padres la necesidad de prevenir los accidentes infantiles, "con la misma importancia que se da a otros aspectos de la medicina preventina, las vacunas por ejemplo". Entre los datos aportados destacan que el 24% de la asistencia en urgencias es por accidentes de niños; entre el 20% y el 30% de cero a 14 años han sufrido algún accidente; una de cada tres muertes infantiles se debe a accidentes.

Los accidentes en el hogar y en la calle suelen ser más frecuentes en la zona urbana, mientras que en el medio rural la calle ocupa el primer lugar. Los niños, con el 66,25%, son los que con más frecuencia sufren accidentes frente al 33,73%. de las niñas. Los pediatras exigen "un programa preventivo" pues en la mayoría de las comunidades autónomas tan solo se han llevado acciones esporádicas dentro de los programas de salud escolar. Dicho programa preventivo debe cumplir al menos tres objetivos: reducir los productos que supongan un peligro para los niños y limitar su accesibilidad, incrementar el uso de equipamientos de seguridad por parte de los niños, y, sobre todo, educar a la población en la seguridad.