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Los principales negociadores del acuerdo entre España y EE UU se reúnen este mes en Nueva York

La visita que hoy emprende a Nueva York el ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, debe servir para "desbloquear" las negociaciones hispano-norteamericanas destinadas a la firma de un nuevo convenio defensivo entre ambos países, dijeron medios diplomáticos de ambas partes. Fernández Ordóñez se entrevistará el día 28 con el secretario de Estado norteamericano, George Shultz. Paralelamente, los principales negociadores del convenio se desplazarán a Nueva York, donde mantendrán la que podría ser última cumbre negociadora.

Fernández Ordóñez viaja a Nueva York para intervenir, el próximo jueves, ante la Asamblea General de las Naciones Unidas. Sin embargo, el ministro aprovechará la ocasión de la Asamblea -una auténtica cumbre mundial diplomática de pasillos- para, como cada año, entrevistarse con numerosos homólogos de otros países. El atasco que sufre la negociación del Convenio defensivo entre España y Estados Unidos, que debería haber quedado suscrito el 14 de mayo, pero que se halla paralizado a causa de diversas divergencias, confiere especial relieve al encuentro que el ministro español mantendrá con Shultz la semana próxima; fuentes del Palacio de Santa Cruz, y también medios diplomáticos norteamericanos, confían en que la conversación entre ambos signifique el "desbloqueo" de unas negociaciones que, según un representante gubernamental español, "duran ya demasiado, haciendo peligrar el clima de buena amistad entre Madrid y Washington".

Última oportunidad

Los mismos medios admiten que la entrevista Shultz-Fernández Ordóñez del próximo miércoles significa "prácticamente la última oportunidad" de que el nuevo Convenio, que sustituya al que venció el pasado 14 de mayo, quede firmado por la actual Administración de Ronald Reagan. Si ello no fuera así, "habría casi que recomenzar la negociación" con la próxima Administración, manteniendo durante un largo período las relaciones hispano-norteamericanas sin un instrumento jurídico, siempre de acuerdo con medios del Palacio de Santa Cruz.Prueba de que el problema del Convenio será la estrella de la estancia de Fernández Ordóñez en Nueva York es el hecho de que los principales negociadores se desplazarán también a Estados Unidos: tanto el jefe de la delegación española, Máximo Cajal, como su adjunto, Eudaldo Mirapeix, viajan hoy con Fernández Ordóñez, y mañana lo hará el embajador norteamericano en Madrid, Reginald Bartholomew, quien hace poco más de una semana ya fue llamado a Washington para consultas. Todo hace pensar que en Nueva York tendrá lugar una cumbre negociadora paralela al encuentro entre el ministro español y el secretario de Estado americano, en un intento por acelerar el fin de las conversaciones y firmar el nuevo Convenio antes de finales de año.

Los temas en litigio entre ambas partes se mantienen, hasta el momento, inalterados: Washington sigue negándose a que en el texto figure la prohibición de "introducir" armas nucleares en territorio español, y también existen diferencias sobre aspectos jurisdiccionales de presos y contrataciones.

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