El nuevo golpe en Haití revela la lucha entre los tres principales jefes militares

El nuevo golpe de Estado ocurrido en Haití el pasado sábado parece reflejar una lucha interna entre las tres principales fuerzas del Ejército, compuesto, aproximadamente, por 7.000 hombres.El sábado le tocó el turno a Henri Namphy, el hasta ahora hombre fuerte, quien ahora sobrelleva estoicamente su derrota política en una suite de un hotel de Santo Domingo, justo al lado de la que ocupó Leslie Manigat, derrocado por él hace 'ahora tres meses. El Gobierno dominicano concedió ayer asilo político al depuesto militar, haitiano.

En Haití han quedado todavía otras dos fuerzas: una es la de Jean-Claude Paul, hasta el domingo responsable del batallón más poderoso del Ejército, nombrado por el nuevo presidente, Prosper Avril, jefe del Ejército. La otra es la del autoproclamado presidente ante las cámaras de televisión en la madrugada del sábado, el general Prosper Avril.

El discurso del nuevo mandatario careció de originalidad. Prácticamente todos los presidentes, incluso Namphy, hablaron al resignado pueblo haitiano de libertades y democracia, de respeto y progreso. Éste también.

"Las fuerzas armadas de Haití no podían caminar ya con la cabeza erguida", dijo Joseph Heureux, líder del movimiento de los suboficiales, que acompañó a Avril durante su proclama presidencial, refiriéndose al asalto el pasado 11 de septiembre de la iglesia de San Juan Bosco, por parte de un grupo de hombres armados, que arrojó el saldo de 11 muertos. Dos días más tarde, otras dos iglesias católicas eran quemadas, mientras que los soldados observaban alejados de los hechos.

El propio Avril se encargó de hacer público al mundo sus nuevas perspectivas políticas y, en la misma noche del sábado, telefoneé al embajador de Estados Unidos en Haití, Branson McKinley. Haití sabe que sin ayuda exterior está perdido, y por eso se ha encaminado rápidamente a ofrecer un cambio de imagen. Estados Unidos estableció como condición previa para reanudar su ayuda que este país mejore la observancia de los derechos humanos, promueva el desarrollo económico, ayude a frenar el narcotráfico y propugne un retorno a un Gobierno civil.

Fuentes oficiosas señalan que el golpe de Estado contra Namphy tuvo además otro motivo: la suspensión del pago desde hace tres semanas a los soldados por falta de fondos, y por eso los primeros informes señalan como protagonistas del golpe a los sargentos de la guardia presidencial haitiana y la base de esa unidad, compuesta por cerca de mil hombres.

Hay una cuestión central en todo este asunto, y es saber qué va a ocurrir con el coronel Jean-Claude Paul. Washington ha hecho público que solicitará la extradición del coronel, a quien se acusa de delitos de narcotráfico y de ser una figura clave en el transito de drogas entre Suramérica y Estados Unidos. "Fue reconocido culpable de tráfico de drogas y seguimos creyendo que debe de comparecer ante la justicia", declaró el Departamento de Estado. De momento, todo son especulaciones, porque ni siquiera se tiene una confirmación absoluta del rango actual de Jean-Claude Paul.

[El general Avril entregó anoche la nómina de su Gabinete, compuesto casi exclusivamente de civiles, en lo que calificó como . un paso indispensable para implantar la democracia, objetivo final del Gobierno militar", informa France Presse. El único militar incluído en el Gabinete es el ministro de Defensa y del Interior, coronel Carl Dorsainvil. Al hacer el anuncio, Avril estaba acompañado por Jean Claude Paul. También se informó de diversos conflictos entre militares en la jornada de ayer.]