Yasir Arafat vincula la formación de un Gobierno palestino a su reconocimiento por Europa

IGNACIO CEMBRERO, ENVIADO ESPECIAL En su primera visita a una institución de la Comunidad Europea, el líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Yasir Arafat, no aclaró a sus interlocutores europeos qué camino piensa elegir en el futuro próximo la resistencia palestina -a la que el rey Hussein de Jordania ha colocado en una encrucijada-, pero dio, en cambio, a entender que la creación de un Gobierno provisional y la proclamación de un Estado independiente en los territorios ocupados por Israel dependerá del grado de reconocimiento que pueda obtener de Europa.

Durante su última jornada de estancia en Estrasburgo, Arafat se entrevistó con los ministros griego y francés de Asuntos Exteriores, Carolos Papulias y Ronald Dumas, respectivamente, y dio también una multitudinaria conferencia de prensa, en la que precisó que el Consejo Nacional Palestino (CNP), el Parlamento de la OLP, convocado para octubre en Argel, barajará dos opciones para Cisjordama y Gaza.La primera consistiría en pedir que las Naciones Unidas o varias potencias ejerzan un mandato temporal sobre los territorios ocupados cuando Israel se retire. La segunda sería la proclamación de un Estado palestino bajo ocupación y la consiguiente formación de un Gobier no provisional. Para preparar la reunión del CNP, un comité jurídico y político "debate (...) las opciones para llenar el vacío j urídico creado por el rey", añadió.

El mes pasado, el rey, Hussein de Jordania tomó la inesperada iniciativa de romper los lazos le gales que unían a su país con Cis jordania, lo que no sólo significa que renuncia a cualquier reivindicación sobre ese territorio, sino que dejará de pagar a 23.000 fun cionarios palestinos a sueldo de reino de Jordania, a los que la OLP intentará, a pesar de la opo sición israelí, girar sus salarios.

La formación de un Gobierno provisional, con algunos miembros en los territorios y otros en el exilio, conllevaría el inconveniente de ahondar las divisiones en la resistencia, porque los grupos radicales apadrinados por Libia o Siria se oponen a ello por considerar que equivaldría a renunciar a recuperar parte de la Palestina ocupada.

Pero la iniciativa de funda ese Gabinete palestino parece sobre todo, depender del grado de aceptación que obtendría, y no sólo por parte de los paíse socialistas o del Tercer Mundo "¿Acaso Europa reconocería a este Gobierno?", se preguntó ayer Arafat en voz alta. "La pregunta es muy importante", aña dió, "porque la creación del Gobierno no depende sólo de la decisión palestina; tenemos que consultar con hermanos y amigos".

Los amigos no parecen muy proclives a dar el paso. Papoulias brindó ayer una calurosa acogida a Arafat, pero se vio obligado a hacerlo como jefe de la diplomacia de un país tradicionalmente proárabe y no como presidente del Consejo de Ministros de la CE, y cuando en su conferencia de prensa fue preguntado sobre si animará a sus homólogos europeos a reconocer al Gobierno, contestó echando balones fuera. Todo lo más, se plantea reunirse con sus colegas español y francés para examinar la situación.

La entrevista que Abu Amar, como llaman a Arafat sus seguidores, mantuvo por la tarde con Dumas fue aún más ilustrativa de las reticencias europeas. A pesar de que el ministro se reunió con Arafat hace años, el encuentro fue oficialmente presentado por el Quai d'Orsay como una consecuencia inevitable del desplazamiento del jefe de la diplomacia francesa a Estrasburgo para ver al presidente del Parlamento, Lord Plumb. En el entorno de Dumas se recalcaba también que la breve conversación, que formalmente no se desarrolló en territorio francés, sirvió para entregarle un mensaje en el que Francia "alienta cualquier movimiento que puede conducir al pueblo palestíno a reconocer a Israel ( ... )", y viceversa.

Reconocer a Israel

Una vez más queda claro que los europeos no darán el paso que les pide Arafat si éste no reconoce previa y explícitamente a Israel, y el líder palestino no parece predispuesto a hacer esa concesión si no está seguro de antemano de conseguir a cambio la aceptación por el Estado israelí de la OLP como interlocutor representativo del pueblo palestino. "Un reconocimiento tiene que ser mutuo", afirmó el martes por la noche a los diputados socialistas que le habían invitado.

Si no obtiene estas garantías, es posible que la dirección palestina se limite a pedir al CNP que formule un llamamiento instando a la comunidad internacional a hacerse cargo de los territorios ocupados, que, según reza el díscurso pronunciado el martes por Arafat, "podrían ser administrados durante un período de tiempo limitado por la ONU o una fuerza europea bajo control internacional", tal y como propuso en su día sin éxito el ex primer ministro italiano Bettino Craxi.

El jefe de la 0 LP se mostró incluso, por primera vez, dispuesto a que la fuerza internacional prolongue su presencia en Cisjordania y Gaza más allá de la fundación del Estado palestino "para garantizar la seguridad de todos", incluida, obviamente, la del adversario israelí.