La CGT argentina desoye a los partidos y ratifica la huelga de hoy

La Confederación General del Trabajo (CGT), central única de orientación peronista, ratificó el paro nacional de actividades para hoy en todo el país a pesar de los llamamientos que hicieron dirigentes políticos de los principales partidos, para que sea suspendida la huelga de 24 horas. En un anuncio publicado en la edición, dominical de los diarios, la CGT justifica la declaración de su 13' huelga general " por la libertad y la dignidad del pueblo trabajador ante el inusitado feroz ataque, inaceptable en la democracia, perpretrado por las fuerzas de la represión".En una conferencia de prensa el secretario general de la CGT, Saúl Ubaldini, desestimó la posibilidad de levantar la huelga, "porque el Gobierno fue el que reprimió en el acto del viernes, y encima felicita a quienes reprimieron".

La mayoría de los dirigentes políticos de la oposición criticó a las fuerzas de seguridad por la "salvaje represión", pero pidió también "calma" a los líderes sindicales. Los funcionarios del Gobierno trataron a su vez de disimular las declaraciones del ex ministro del Interior, Antonio Tróccofi, quien responsabilizó de los grandes enfrentamíentos del viernes -durante el acto organizado por la CGT en la plaza de Mayo- a sectores extremistas del peronismo. Tróccoli recordó la llamada matanza de Ezeiza, cuando Perón, regresó al país en 1973, y advirtió sobre "lo que puede ocurrir en 1989" si el peronismo gana las elecciones generales.

El pasado de Tróccoli

Los líderes peronistas Antonio Cafiero y Carlos Menem firmaron una respuesta conjunta, también publicada en los periódicos de ayer, en la que acusan a Tróccoli de "cínico" y de "reabrir falsas antinomias". Cafiero y Menem revisan el pasado de Tróccoli, vinculado a la dictadura militar y a los grupos de secuestradores que provocaron su renuncia al cargo hace un año.

El actual ministro del Inte,rior, Enrique Nosiglia, visitó a los policías heridos, y todas las cadenas de televisión difundieron constantemente sus declaraciones, acompañadas con imágenes en las que sólo se veía a los manifestantes romper escaparates y arrojar piedras contra la policía.

El informe oficial de la policía reconoce 76 heridos y sólo 13 personas detenidas. La Prensa recoge el testimonio de transeúntes atacados por la policía a varias manzanas de distancia de la plaza de Mayo. Los médicos que atendieron a Overdán Noriega, el secretário de la Federación de Trabajadores de Vialidad, uno de los tres sindicalistas heridos de bala, aseguran que la trayectoria del proyectil, que le destrozó la rodilla, es vertical, "corno si le hubieran tirado desde algún piso".