_
_
_
_
_

Un descubrimiento aeronaval

Milagros Pérez Oliva

La técnica de la litotricia extracorporal por ondas de choque se descubrió por casualidad. Fue la empresa aeronaval alemana Dornies quien lo hizo, hace veinte años. Sus técnicos observaron que las gotas de lluvia dañaban el fuselaje de los aviones con una intensidad superior a lo previsto. Pronto encontraron la explicación: se trataba de un principio físico según el cual, siempre que un cuerpo se mueve en un medio con una velocidad superior a la del sonido, provoca ondas de choque.Cuando esto sucede se generan presiones cada vez de mayor intensidad que se propagan tanto en cuerpos sólidos como en líquidos, siguiendo unas leyes físicas muy parecidas a las de la acústica. Pero a diferencia del ultrasonido, las ondas de choque están constituidas por un sólo impulso de presión tan breve que se mide en términos de nanosegundos. Cuando se desplaza en un medio líquido, la fuerza de la ondas es regulable y además puede ser dirigida a un punto concreto.

Más información
Piedras biliares trituradas por ondas

El 80% del organismo humano es agua, por eso se ha elegido este medio para formar las ondas. En la litotricia biliar no se introduce al enfermo en una bañera, como ocurre en algunos modelos de litotricia renal. Por razones de ubicación de la vesícula biliar, se utiliza un recipiente de goma lleno de agua que se adhiere al abdomen del paciente.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_