El vicepresidente filipino pide a Corazón Aquino que abandone el poder

Salvador Laurel, vicepresidente de Filipinas, pidió ayer a la jefa del Estado, Corazón Cory Aquino, que abandone el poder, y la acusó de haber provocado en el país, desde su llegada al Gobierno de la nación, la corrupción y la incompetencia.Aquino, por su parte, en una, improvisada conferencia de prensa, acusó al vicepresidente: de "no haber colaborado con ella" ni tan siquiera en los difíciles momentos en los que el sistema democrático se tambaleaba a causa de las intentonas golpistas

Laurel se reunió con los periodistas para hacer pública una carta dirigida a la presidenta en la que le sugiere que dimita "por el bien de la nación", que ha sucumbido "a la anarquía y al desgobierno" desde que Cory asumió la presidencia en 1986.

El vicepresidente subrayó que bajo el mandato de Aquino se ha recrudecido la actividad de las guerrillas comunistas y comparó la mala gestión de la presidenta con los últimos años del dictador Ferdinand Marcos. Laurel, uno de los políticos más experimentados de Filipinas, acusó a Aquino de incumplir un pacto secreto según el cual ella le cedería la presidencia dos años después de acceder al puesto. También desmintió que estuviera implicado en conspiraciones militares.

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