Japón amenaza con llevar al GATT la ley comercial de EE UU
El Gobierno japonés protestó ayer oficialmente por la aprobación el día anterior por el Senado norteamericano del proyecto de ley comercial, y advirtió que, si Washington hace uso de la futura legislación, Japón puede llevar el conflicto a la decisión del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT).Por su lado, el presidente Reagan anunció, horas después de la aprobación del Senado, su intención de no vetar el nuevo proyecto de ley comercial, que teóricamente permitirá imponer sanciones comerciales a terceros países en determinados casos.
Asimismo, el ministro alemán de Economía, Martín Bangeman, hizo pública una declaración formal en la que el Gobierno federal alemán "lamenta" la decisión de Reagan de abstenerse de ejercer su derecho a vetar el proyecto de ley comercial. Bonn reiteró su opinión de que el proyecto comercial norteamericano es "restrictivo" y afectará negativamente al comercio mundial.
Un comunicado oficial de Hajime Tarnura, ministro japonés de Comercio Internacional e Industria, también expresó una opinión similar: "Espero fervientemente que la Administración norteamericana mantenga su postura habitual de defender el libre comercio y, al mismo tiempo, no perjudique la relación bilateral en la industria".
La declaración japonesa, hecha pública después del voto en el Senado norteamericano, advirtió, finalmente, que "si el proyecto se convierte en ley, Japón se reserva el derecho de analizar el cumplimiento de la ley en el contexto de los acuerdos del GATT".
El Gobierno japonés ha llevado a cabo, a lo largo de los últimos meses, una fuerte campaña en Estados Unidos en contra de la aprobación de la ley comercial, ya que entiende que algunas de sus cláusulas son perjudiciales para sus intereses.
Entre ellas, medios japoneses citan la facultad de la Administración norteamericana para adoptar sanciones contra un país que, en su opinión, afecte negativamente al interés comercial de Washington, las sanciones directas que impone a la compañía Toshiba durante tres años por vender material avanzado a la Unión Soviética y, por último, las restricciones que impone a las firmas bursátiles japonesas para operar en Estados Unidos.
Presiones
La Administración de Ronald Reagan trató en un primer momento de hacer desaparecer las sanciones a la compañía Toshiba del proyecto de ley, pero, ante la fuerte oposición en el Congreso, desistió. La Casa Blanca también ha fracasado a la hora de convencer a los legisladores para que la normativa comercial fuera menos restrictiva y sancionadora.
El proyecto de ley, que se convertirá en ley de forma definitiva en un plazo determinado una vez que Reagan confirmara que no lo vetará, establece otras provisiones que tendrán un fuerte impacto económico y comercial a medio plazo. Cabe destacar, entre ellas, la anulación del impuesto sobre producción de petróleo interior, propuesta por el ahora candidato demócrata a la vicepresidencia norteamericana, el senador Bentsen, de Texas. La anulación de este impuesto beneficia los intereses petroleros texanos, y, según el Instituto Americano de Petróleo, reducirá el volumen de importaciones de crudo extranjero.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.