El lider búlgaro refuerza su posición y elimina a su rival reformador

Todor Jivkov, de 76 años, 34 de ellos en el poder, secretario general del partido comunista búlgaro y decano de los jefes de Estado de los países del bloque socialista, ha reforzado su posición frente a los sectores más aperturistas. En una reunión del Comité Central del partido celebrada el martes y miércoles pasados en Sofía, destinada a debatir los documentos de un próximo congreso de la ciencia, la cultura y la educación, se decidió la salida del Politburó y el cese de sus funciones en el secretariado de Chudomir Alexandrov, de 52 años, número dos del régimen y principal impulsor de la línea reformadora.El cese de Alexandrov, además de frenar la reforma en Bulgaria -pese al tono aperturista mantenido en los últimos meses por el primer ministro, Georgi Atanasov-, parece indicar que Jivkov no está dispuesto a delegar funciones.

Asimismo, los ceses de otros tres dirigentes -Stanko Todrov, miembro del Politburó y presidente de la Asamblea Nacional, Svetlin Rusev y Stoian Mijailov, miembros del Comité Central-, marcan el límite a la de crítica y la transparencia en el país. La sustitución al frente del departamento ideológico de Mijailov por Jordan Yotov, de 67 años, formaliza el estilo conservador del veterano líder búlgaro.