España e Italia llegan a un acuerdo sobre la coordinació defensiva en el Mediterráneo

España e Italia Negaron ayer, en el tiempo récord de una cumbre bilateral de menos de cuatro horas de duración, a acuerdos sobre coordinación defensiva en el Mediterráneo yel flanco sur de la Alianza Atlántica, sobre cooperación industrial, sobre armonización de legislaciones en pequeñas y medianas empresas y sobre intercambios culturales. IA tercera cumbre anual hispano-italiana, presidida, en un aristocrático palacete del siglo XVII, por el primer ministro de la República Italiana, Ciriaco, de Mita, y por el presidente del Gobierno español, Felipe González, resultó, según indicaron fuentes de ambos países, la más eficaz de las celebradas hasta ahora.

Ambas partes trataron de obviar temas molestos -como el futuro traslado a Italia de los aviones F-16- y se concentraron, dijeron estas fuentes, en buscar acuerdos positivos.Al final del encuentro, al que asisteron tres ministros españoles -de Asuntos Exteriores, Economía y Hacienda y Defensa, Francisco Fernández Ordóñez, Carlos Solchaga y Narcis Serra, respectivamente- además del secretario de Estado para las relaciones con la Comunidad Europea, y seis ministros italianos, los dos jefes de Gobierno comparecieron ante la prensa para anunciar, visiblemente satisfechos, que habían llegado al acuerdo de cooperar en la reactivación de la Comunidad Europea, ahora que España va a ocupar la presidencia.

Este anuncio, fue seguido por otro, según el cual España e Italia tratarán, mediante la creación de un grupo bilateral encabezado por los respectivos ministros de Exteriores y Defensa, de dar "un perfil más elevado" a su "colaboración política y militar en el Mediterráneo".

Ambos países aprobaron un documento sobre seguridad en el Mediterráneo, que, dijo una fuente diplomática española, "trata de contemplar también las perspectivas de paz en Oriente Próximo, tras el acuerdo de Argel entre los países del Magreb". Madrid y Roma coordinarán sus respectivos sistemas de defensa aérea y de Marina militar "en el área de intereses comunes".

El titular de Defensa, Narcís Serra, aunque manteniendo siempre su habitual hermetismo con la prensa, detalló también los proyectos bilaterales en marcha sobre cooperación industrial militar e informó sobre el apoyo que Italia prestará a España en sus aspiraciones de ingresar en la Unión Europea Occidental (UEO), tema en el que sugirió que podrán darse pasos decisivos a finales de este año.

Flanco sur de la OTAN

Igualmente habrá colaboración, dijeron De Mita y González en una declaración pública que no fue oficialmente traducida al castellano, en los temas de interés común en el ámbito de la OTAN, "con particular referencia al flanco sur de la Alianza".

La declaración excluía cualquier alusión a la aceptación por Italia de los aviones F-16 actualmente estacionados en Torrejón, y, por supuesto, excluía también cualquier crítica como las que Italia realizó en el pasado a la falta de cooperación atlántica mostrada por España al rechazar estos aviones

Posteriormente, De Mita dijo que "comprendía la dificultad de las decisiones españo las" y su posición en el seno de la OTAN, mientras González, por su parte, aseguraba que "a los españoles nos produce gratitud" la acogida italiana de los cazabombarderos norteamericanos.

Así quedaba solventado el más espinoso de los temas que podrían haber ensombrecido esta tercera cumbre hispanoitaliana a la que serguirá, la próxima primavera, otra en Madrid. Previamente De Mita -o quien entonces ocupe la jefatura del Gobienro italianovisitará oficialmente España, respondiendo a la invitación cursada ayer por Felipe González, quien hasta ahora no había tratado bilateralmente al dirigente democristiano.

También se acordaron en la reunión de ayer acciones concretas para la coperación en materia industrial -con la constitución de dos grupos específicos de trabajo en los sectores ferroviario y aeronáutico- en la legislación sobre pequeñas y medianas empresas y en el terreno cultural.

En este último aspecto, se acordó la participación española en la exposición específica de 1992 en Génova, que, como la sevillana, conmemora los 500 años del descubrimiento de América, solvéntandose -Italia participará, a su vez, en la Exposición Universal española- otra posible nube en el horizonte. Otros dos acuerdos culturales se refieren a la convalidación de diplomas universitarios y a la creación de cátedras de cultura italiana en España y viceversa.

Felipe González concluyó su visita oficial de trabajo de ayer a Italia con un breve "encuentro de cortesía" con el presidente de la República, Francesco Cossiga.