Las cifras de la escopeta y el anzuelo

El último censo conocido correspondiente a 1986 muestra la existencia de un millón y medio de cazadores que abatieron durante ese mismo período 25 millones de perdices, liebres, conejos y otras aves, además de 60.000 venados y jabalíes en un territorio que ocupa casi las tres cuartas partes de España. Estas acciones han movido aproximadamente 100.000 millones de pesetas.La caza española ha llamado también la atención de 30.000 cazadores extranjeros. De esta manera, se han paseado por los cotos españoles principalmente cazadores italianos, franceses, norteamericanos, belgas, suizos, alemanes y británicos.

Sólo son 45 las especies que está permitido abatir. Entre ellas las denominadas caza mayor (jabalí, ciervo, gamo, corzo, rebeco, cabra montés, muflón, arruí y lobo), los mamíferos predadores (zorro, marta, tejón, gineta, turón, comadreja y visón americano) y la caza menor (resto hasta completar las 45 especies). Por el contrario, las especies de la fauna ibérica estrictamente protegidas por el convenio de Berna son 141 (incluyendo en este catálogo mamíferos, aves, anfibios y reptiles).

Cada vez se va extendiendo más la modalidad de criar piezas -perdices y otras- para ser cazadas en un coto particular. Se ha creado la comercialización de la caza: se paga una cuota de entrada al coto y otra cantidad a la salida, según las piezas cobradas.

Respecto a la pesca, en 1986 la Administración concedió 583.096 licencias de pesca. Las épocas hábiles de pesca varían según las especies -salmón, trucha, lucio, black-bass, ciprínidos y otros- entre los meses de marzo y agosto. Una licencia de pesca cuesta 1.000 pesetas.