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'Todo fluye', ocho artistas hacen un homenaje al agua

El depósito elevado del Canal de Isabel II alberga en su construcción, ahora transformada para convertirse en sala de exposiciones, una serie de obras de arte dedicadas al agua. Jesús María Lazkano, José Maldonado, Din Matamoro, Begoña Goyenetxea, Javier Colís y Manuel Saiz, Perejaume, Juan Ramón Yuste y Antonio Cano presentan sus trabajos hasta el 17 de julio.

Todo fluye pretende ser sobre todo una exposición que no se detiene en las fronteras entre las disciplinas plásticas. La instalación convive con la pintura, y la escultura con la fotografía, en un espacio arquitectónico a veces tan imponente que las obras dificúrnente destacan en él. El depósito elevado del Canal de Isabel II, vacío desde hace años y convertido en sala de exposiciones, vuelve a contener agua, aunque en esta ocasión como motivo de reflexión visual.La selección de los artistas y de las obras responde a la idea central que los ha reunido. No son encargos, sino obras que ya contenían el elemento del agua como referencia o tema de reflexión, Los trabajos realistas de Jesús María Lazkano evocan paisajei; como los del siglo XIX bajo el ojo de nuestro tiempo.

Las esculturas de Begoña Goyenetxea recogen el corte de las tallas primitivas, en contraste con la melancólica instalación de Javier Colís y Manuel Saiz titulada Montaña de lágrimas. Un contraste que se da más en el plano de las disciplinas artísticas utilizadas que en el del concepto y los materiales.

Las fotografías de Juan Ramón Yuste y las pinturas de Maldonado aluden con su colorido y planteamiento al arte urbano de nuestros días. Din Matamoro, con un impacto visual parecido, se deplaza hacia los paisajes turbulentos.

Perejaume presenta, más que una obra, una prueba de la existencia real de una de sus obras, El murall des crous, porque como tal queda expuesta en la muestra. Sólo las fotografías del emplazamiento original dan la medida del intenso y eficaz sentido poético

La videoinstalación de Antoaio Cano sí está hecha a la medita del lugar. El título de la obra Burguesía y se manifiesta en lo planos. Una mesa puesta con mantel largo, candelabros, copas vajilla de porcelana, con comensales invisibles a los que se escucha manipular los cubiertos, mientras una imagen proyectada al centro de la mesa deja caer la imagen diluida de una gota. mesa está sobre un río seco grava que se deja oír; entre o guijarros, ocho monitores reproducen cada uno también la caída de una gota que desplaza el agua bajo la punta amenazadora de un pesado péndulo que cuelga desde lo alto.

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