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RELIGIÓN

120 personas piden a Bandrés que solicite la derogación del 'impuesto religioso'

Un total de 120 personas ha suscrito una iniciativa ciudadana para modificar la normativa que regula la asignación tributaria a la Iglesia en la declaración del impuesto sobre la renta. El documento ha sido remitido al diputado del Grupo Mixto Juan María Bandrés, a quien instan a solicitar la derogación del llamado impuesto religioso, que, a juicio de los firmantes, contradice los "elementales principios democráticos".

Entre las personas que suscriben la iniciativa se encuentran filósofos, escritores y profesores universitarios como Fernando Savater, Tomás Pollán y Javier Muguerza.En el texto remitido a Bandrés se considera la asignación tributaria "una burla a los contribuyentes", ante la permanencia de la aportación por parte del Estado de casi 14.000 millones de pesetas a los gastos de la Iglesia durante los próximos tres años.

Los firmantes predicen una "estafa", tras cumplirse ese plazo, al señalar que quienes no suscriban la asignación tributaria deberán correr con los recursos necesarios para obras sociales. En consecuencia, consideran que "es un escándalo para los católicos" que la ley les conceda "el triste privilegio de contribuir menos".

Al mismo tiempo, las personas que suscriben la iniciativa ciudadana denuncian la posibilidad de que a través del impuesto religioso se cree un "censo de opiniones", con riesgo de ser utilizado "por los enemigos de la libertad".

El diputado y presidente de Euskadiko Ezkerra, Juan María Bandrés, manifestó ayer en el Congreso que considera necesario consultar la cuestión planteada en la iniciativa ciudadana con expertos de su partido y con algunos de los firmantes.

"Un debate interesante"

En principio, Bandrés no ha precisado con qué tipo de iniciativa parlamentaria se puede llevar adelante la solicitud de los firmantes. No obstante, Bandrés consideró que la petición merece ser considerada, ante la calidad de las personas que la firman.Bandrés regresó ayer de Nueva York, donde ha participado en un seminario sobre los 10 años de vigencia de la Constitución española. Según indicó, el escrito le ha causado una gran sorpresa, y consideré que "plantea un debate interesante".

A su juicio, esas inquietudes no son ajenas a las de algún sector de Euskadiko Ezkerra, y señaló que desde la aprobación de la ley de Presupuestos Generales del Estado para 1988, el pasado mes de diciembre, la cuestión del impuesto religioso ha sido planteada varias veces. El hecho de que se trate de una norma legal no impugnada trae consigo problemas formales a la hora de poner en marcha iniciativas parlamentarias.

Bandrés indicó además que la declaración de la renta, que realiza conjuntamente con su esposa, a petición de ésta destinará la asignación tributaria a la iglesia.

El escritor y profesor Fernando Savater manifestó ayer a este periódico que el denominado impuesto religioso va en contra de los principios democráticos. "El Gobierno no debe ser un recaudador de impuestos religiosos", señaló Savater, "como si se tratara del régimen del Irán de Jorneini".

A su juicio, quien quiera colaborar económicamente con la Iglesia puede hacerlo libremente y por su cuenta. "Sin embargo", agregó Savater, "no debe existir un censo de opiniones de quienes no quieran pagar a la Iglesia".

El escritor suscribe el temor, reflejado en el texto de la iniciativa ciudadana, de que en un futuro se pueda hacer un uso antidemocrático del censo de opinión creado a través de la opción, por parte de los contribuyentes, de la asignación tributaria a la Iglesia.

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