Los supervivientes del buque español hundido por Irak regresarán el miércoles

Los supervivientes del petrolero español Barcelona, hundido el sábado por aviones iraquíes mientras cargaba crudo en el estrecho de Ormuz, llegarán a Madrid el miércoles, según previsiones de la naviera propietaria del buque, que gestiona con la Embajada de España en Abu Dabi la repatriación de 34 tripulantes. Anoche, sobre las 22.30, hora peninsular española, llegaron a Dubai (Emiratos Arabes) para viajar a Europa una vez que sean provistos de documentos y de objetos personales.

En el ataque a la plataforma de carga de crudo en la isla iraní de Larak resultaron afectados cinco petroleros, hundiéndose el Barcelona y desapareciendo medio centenar de tripulantes, entre ellos cuatro del buque español, de los que fue recuperado un cadáver.Junto a los 35 españoles que anoche llegaron a Dubai, el otro superviviente de la tragedia del Barcelona, el camarero Francisco La Madrid, de 49 años, que había sido rescatado por el petrolero Independence junto a otros 20 compañeros, fue trasladado ayer por un remolcador iraní a la ciudad costera de Bandar Abbas y, tras ser atendido de diversas contusiones leves, viajó a Teherán, de donde lo hará a España en los próximos días.

Los supervivientes, alojados en el petrolero liberiano Independence tras su rescate en la tarde del sábado, fueron trasladados a media tarde de ayer a una lancha, fletada por la naviera propietaria del Barcelona, y llevados al puerto de Ras al Haima, capital del mismo emirato. Allí los recibieron el embajador español en Abu Dabi, Carlos Vinuesa, y representante de la naviera. Desde ese puerto, viajaron por carretera a Dubai, donde pasarán las próximas horas antes de proseguir nimbo, probablemente mañana por la noche, con destino a Europa.

Durante todo el fin de semana, desde el Ministerio de Asuntos Exteriores se trabajó en un dispositivo para ayudar a los supervivientes del petrolero, a sus familias y a la empresa propietaria. Los embajadores españoles en la zona se movilizaron para seguir de cerca el caso y ayudar para el regreso de los supervivientes. La embajada en Teherán gestiona la repatriación del herido trasladado ayer a la ciudad portuaria de Bandar Abbas y del cadáver del marinero Eloy de las Cuevas. El consejero Santiago Cabañas sigue de cerca las labores de rescate del medio centenar de desaparecidos el sábado, tras el ataque a cinco petroleros. Ayer, entre los varios cadáveres recuperados no figuraba ninguno de los tres españoles del Barcelona desaparecidos.

El ministro de Asuntos Exteriores español, Francisco Fernández Ordóñez, que el mismo sábado, pocas horas después del hundimiento del Barcelona, convocó al embajador iraquí para transmitirle una "enérgica protesta", mostró ayer su preocupación por el incidente. "Es un hecho muy grave por el número de barcos atacados, por el número de muertos y por ser varios los países afectados", dijo el ministro a este diario. Fenández Ordóñez expresó su pesimismo sobre la situación del conflicto irano-iraquí, "una guerra espantosa, que de vez en cuando emerge ante nosotros con hechos como éste, que nos dan cuenta de su gravedad; el resto no lo vemos".

La empresa propietaria del barco ordenó ayer a otro de sus petroleros, el Aragón, que permanezca amarrado en las cercanías del estrecho de Ormuz y no emprenda hoy viaje al Golfo Pérsico, como estaba previsto. La empresa requirió a Repsol para que confirme la orden de carga de 236.000 toneladas de crudo en Ras Tanura (Arabia Saudí).

La empresa propietaria informó de que cuando el Barcelona fue atacado había cargado ya 140.000 toneledas de crudo, de un total de 235.000 toneledas de carga total previstas, y que se componían de 900.000 barriles de irán pesado, y 800.000 toneladas de iran ligero.