200 altos cargos y 90. 000 funcionarios

, Si la oposición desbancara a Convergència i Unió (CiU) en las elecciones autonómicas del próximo 29 de mayo, el cambio de altos cargos afectaría sólo a unas 100 personas, que integran el aparato propiamente político que dirige la Administración autonómica, según Maria Lluisa Florensa, directora general de la Función Pública. Hay 11 consellers al frente de sus respectivos departamentos y 12 secretarios generales. Uno de éstos, el de la Presidencia, cuyo titular es Lluís Prenafeta, es en la práctica el número dos de todo el aparato gubernamental en su calidad de hombre de confianza del presidente Jordi Pujol.

Les siguen unos 70 directores generales y 20 subdirectores generales. Miquel Roca preside la parte catalana de la Comisión de Traspasos y de la de Cooperación Estado-Generalitat.

A este cuadro de honor político, en el que figuran sólo cinco mujeres, hay que añadir, sin embargo, otros numerosos cargos de designación directa en organismos autónomos, consejos de administración de empresas públicas y de otros organismos administrativos, comerciales o de servicios como, por ejemplo, el director general de TV-3, o los delegados provinciales de la Generalitat, que son como unos pequeños gobernadores civiles de la Administración autonómica. El total de altos cargos con responsabilidad política se eleva así a unas 200 personas.

Los sucesivos Gobiernos catalanes han contratado, desde el restablecimiento en 1978 de la Generalitat provisional, que presidió Josep Tarradellas, hasta ahora a unas 3.500 personas, casi todas para crear los servicios centrales de la nueva Administración autónoma, concentrados en Barcelona. Mediante sucesivas convocatorias de oposiciones se han convertido en funcionarios, con lo que se ha creado un aparato que en la práctica dirige a los funcionarios traspasados por la Administración central.

La Generalitat disponía en enero de 1988 de 39.507 funcionarios docentes para la gestión de la enseñanza pública y de 26.094 para la de la Seguridad Social. Del resto del personal, 14.386 figuran como funcionarios y 6.897 como personal laboral fijo.

La Administración autónoma une sus departamentos mediante una red informática conectada a unos ordenadores centrales que le permite asegurar a la directora general que se trata de "una organización modélica". Aunque, admite, muy centralizada en Barcelona.