_
_
_
_

Válvulas contra la hidrocefalia

Un equipo español trabaja en un nuevo modelo que podrá ser controlado desde fuera del paciente

Un grupo de 300 destacados especialistas se ha reunido en Madrid recientemente, en un simposio internacional, para debatir los últimos avances en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades de la columna vertebral. Estas enfermedades tienen un relieve especial en los niños, particularmente en los que padecen espina bífida, que se presenta en uno de cada 1.000 nacidos vivos. Esta malformación se puede complicar con parálisis de los miembros inferiores, incontinencia de esfínteres e hidrocefalia (aumento anormal de la cantidad de líquido en el cerebro).

Alrededor del 10% de la cavidad craneal está ocupado por un líquido acuoso llamado cefalorraquídeo, que baña los delicados tejidos cerebrales y la médula espinal, protegiéndolos de los traumatismos.Este fluido circula por el sistema nervioso central, dentro de la caja del cráneo a través de un sendero formado por un sistema de cuatro cavidades interconectadas llamadas ventrículos. En condiciones normales existe un equilibrio entre la cantidad de este líquido producido en el cerebro y el eliminado hacia el torrente sanguíneo.

Cuando este balance se rompe, es decir, cuando es mayor la tasa de producción que la de absorción, el exceso de fluido se acumula dentro del cráneo. Como el cerebro es una estructura encerradas en una caja de paredes óseas, y que no se puede expandir como otros organos del cuerpo, con la piel o los intestinos, aumenta gravemente la presión dentro del cráneo. Incluso siendo un hecho el que los huesos infantiles gozan de más flexibilidad que la de los adultos, al final se produce la hidrocefalia.

Derivaciones del líquido

Una de las causas más frecuentes de la misma es el bloqueo de las vías de desagüe del líquido cerebro espinal en cualquier punto de su recorrido debido a la espina bífida congénita (hendidura de los arcos vertebrales a través de la cual puede salir la médula espinal y sus envolturas, formando un tumor bajo la piel).En los niños pequeños, en los que el cráneo no está completamente formado, el aumento de la presión dentro de la cabeza debido al hidrocéfalo dilata los ventrículos y agranda el tamaño del cráneo. El cerebro queda comprimido, pudiendo aparecer complicaciones en el funcionamiento del sistema nervioso.

Según el doctor Villarejo, neurocirujano del hospital del Niño Jesús de Madrid, en el momento actual las derivaciones del líquido cerebro espinal mediante el empleo de válvulas reguladoras es el tratamiento ideal para la hidrocefalia. Los casos que no lleguen a tratarse pueden desarrollar aumentos monstruosos del volumen de la cabeza, fenómeno que se denomina macrocefalia, que acaban con la vida del paciente.

En la experiencia del equipo de este doctor, con más de 500casos de hidrocefalias infantiles tratadas, la operación idónea consiste en implantar una válvula que desvía el exceso de líquido desde el cerebro al peritoneo, para reducir la presión intracraneal. Sólo el 30% de los pacientes necesitará nuevas intervenciones quirúrgicas. Estos buenos resultados se producen, según Villarejo, si el paciente es remitido a un centro especializado en este tipo de intervenciones lo antes posible.

La técnica quirúrgica es sencilla y se realiza con anestesia general. Según este experto cirujano, director del citado simposio, se realiza un pequeño agujero en el cráneo y una pequeña incisión en el abdomen para la implantación de este aparato.

La válvula que se coloca está conectada a dos tubos: uno va a los ventrículos cerebrales para recoger el exceso de líquido y el otro se dirige al abdomen del paciente, en concreto a la cavidad peritoneal. Allí se puede drenar el fluido recolectado.

Generalmente el tubo de drena e discurre por debajo de la piel del cuello, tórax y abdomen hasta llegar a la cavidad peritoneal. Los niños que portan estas válvulas no están limitados a sus acciones cotidianas salvo para los ejercicios físicos violentos.

Regulación externa

Actualmente el doctor Villarejo está trabajando en el diseño de un nuevo tipo de válvula, ya en su fase final.Este dispositivo regula la presión dentro del cráneo, abriéndose cuando ésta aumenta. La presión de apertura de la válvula puede además ser regalada desde el exterior del paciente, ya que se implanta bajo las partes blandas de la cabeza. Además este dispositivo permite el control del flujo del líquido cefalorraquídeo, abriéndose la válvula cuando se produce más líquido.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_