La discusión sobre Chipre en la CE aleja la reconciliación entre Turquía y Grecia

El proceso de reconciliación entre Greda y Turquía sufrió el lunes por la noche un serio revés en Luxemburgo donde un grave Incidente, provocado por la negativa turca a hablar del problema de Chipre, enfrentó al ministro turco de Asuntos Exteriores con sus 12 homólogos de la Comunidad Europea (CE). Lo sucedido es un golpe duro para el espíritu de Davos". afirmó el jefe de la diplomcia turca, Mesut Yilmaz, en una alusión a la ciudad suiza donde Andreas Papandreu y Turgut Ozal, primeros ministros de ambos países, sentaron las bases para la mejora de sus relaciones.

A instancias de Grecia, sus socios comunitarios habían acordado evocar la cuestión chipriota en un llamado Consejo de Asociación que reúne periódicamente a los titulares de Exteriores de la CE y de Turquía, a cuya delegación pretendían explicar que la ocupación de parte de la isla por tropas turcas podía tener repercusiones negativas sobre las relaciones entre Bruselas y Ankara.A pesar de los esfuerzos del ministro de la República Federal de Alemania, Hans Dietrich Genscher, por evitar una airada reacción turca, Yilmaz y su equipo se negaron a asistir al encuentro, que tuvo que ser suspendido, argumentando que el Consejo de Asociación no era el foro adecuado para abordar un contencioso bilateral greco-turco.

Turcos y comunitarios celebraron, no obstante, una cena juntos en un lujoso hotel luxemburgués, pero el tono de laconversación que mantuvieron Me.sut Yilmaz y el ministro gnego para las relaciones con la CE, Theodoros Pangalos, no contribuyó precisamente a apaciguar los ánimos, según comentó ayer su colega belga, Leo Tindemans.

Tensa dismión nodurna

Aún tenso tras la discusión nocturna, Yilmaz afirmó a la salida que "Turquía no dará marcha atrás, y se seguirá negando a hablar de Chipre en este marco", y en ulteriores declaraciones a la agencia de noticias turca Anatolia el ministro advirtió que "la continuación del espíritu de Davos no puede sólo ser preservada gracias a los esfuerzos unilaterales de Ankara".

Theodoros Pangalos, por su parte, convocó ayer a la Prensa para explicar que "Turquía no acaba de entender cómo se trabaja en la CE". "No es tolerable decir que no se quiere escuchar, es antidemocrático, uno puede estar en desacuerdo, pero no por eso tiene derecho a decir a la otra parte lo que puede o no puede expresar. Es algo que tienen que aprender si desean incorporarse a la Comunidad".

Grecia es miembro de la CE desde 1980, y Turquía goza de un estatuto de asociación a la Comunidad desde 1963, pero hace exactamente un año presentó su candidatura, a pesar de lo cual, Atenas sigue bloqueando ayudas comunitarias para el país rival por valor de 82.000 millones de pesetas, porque, entre otras cosas, entre 18.000 y 30.000 soldados turcos -ocupan en la actualidad el norte de Chipre.

Genscher ha prometido hacer todo lo posible por convocar otro Consejo de Asociación antes de que el próximo mes de julio expire la presidencia alemana de los doce, pero la insistencia griega -respaldada ahora por un mayor número de Estados miembros- en mantener la alusión a Chipre inducc a.sospechar que la reacción turca será similar.

A menos que la diplomacia germano occidental encuentre la manera de superar el escollo, parece lo más probable que la reunión no se celebre.