Craxi exige el fin del monopolio informativo de la RAI

Un pacto entre socialistas y democristianos italianos está a punto de poner fin al monopolio televisivo de la RAI-TV. Entre hoy y mañana el encargado de formar Gobierno en Italia, el líder democristiano Ciriaco de Mita, comunicará al jefe del Estado, Francesco Cossiga, su disposición a formar un nuevo Gabinete, deshaciendo así la tradicional reserva con la que se acepta en este país tan delicada misión. Entre las principales concesiones a los socialistas, sin cuya colaboración De Mita no podría gobernar sin caer en manos comunistas, se encuentra la reglamentación de la RAI-TV, que desembocará en la implantación de un sistema mixto y pluralista

Éste ha sido el último escollo y último tema de debate entre los cinco partidos que van a formar el nuevo Gobierno (democristianos, socialistas, republicanos, socialdemócratas y liberales).Los socialistas han pedido mucho. De Mita ha prometido concederles bastante, aunque no todo, porque, además, dentro de su partido no todos están de acuerdo en traspasar la RAI-TV a manos privadas. Los socialistas han pedido concretamente a De Mita que, en primer lugar, "se regule el servicio público, actualmente en régimen transitorio". Y concretamente, que "se revise el plan nacional de reparto de las frecuencias" para permitir que exista una televisión pública y otra privada, "a fin de garantizar así un adecuado pluralismo". Los cientos de emisoras privadas de televisión que funcionan actualmente no están autorizadas a transmitir en cadena.

La RAI, según los socialistas, debería quedarse como máximo con el 50% de los programas informativos de las emisoras privadas, las cuales podrían emitir telediarios a nivel nacional. La única limitación que,ponen los socialistas es que un solo grupo privado no pueda poseer más de tres canales y, de ellos, que sólo uno pueda emitir telediarios nacionales. Y, al mismo tiempo, que quien posea cadenas de televisión nacionales no podrá controlar más del 10% de la Prensa italiana. Y, viceversa, quien posee ya más del 10% de los medios escritos no podrá controlar un canal con vocación nacional.

Dos personajes

Pero aquí la discusión no será fácil, porque afecta a dos personajes bien concretos. El primero, Silvio Berlusconi, que posee ya cuatro cadenas de televisión y que tendría que renunciar a la propiedad del diario Il Giornale, de Milán, dirigido por Indro Montaneli, quien ya ha elevado una furibunda protesta. El otro personaje es Gianni Agnelli, quien, poseyendo ya, según algunos observadores -aunque el grupo Fiat lo niega-, el 20% de la Prensa, no podría contar con un canal de televisión nacional. Pero De Mita no quiere privar al rey de Fiat de tal posibilidad, y así ha propuesto que sólo quien posea actualmente más del 20% de la Prensa (pensando que Fiat no llega a esa cifra) quede fuera de la televisión. Sin embargo, lo que interesa sobre todo a los socialistas es que Berlusconi, cuyo gran protector ha sido siempre Craxi, pueda finalmente poseer en paz sus canales de televisión y competir con la RAI en lo único que le falta: los programas en directo y la información a escala nacional. Los socialistas cuentan a fondo con estas cadenas para las futuras campañas electorales. El mayor sacrificio es para la Democracia Cristiana, que, con el monopolio de la RAI-TV, al mando de un director general que en 40 años ha sido siempre democristiano, se había asegurado el control informativo.Los socialistas han contado en los últimos años con el presidente de la RAI, un cargo más bien honorífico. Por eso han pedido también que se le den por lo menos idénticos poderes al presidente y al director general. Pero De Mita no pasa por ahí.