La policía de Granada 'disuelve' a las floristas y los limpiabotas
La policía local de Granada se enfrentó el miércoles con dureza junto al recinto de la Alhambra a una veintena de floristas y limpiabotas que trataban de aproximarse a los numerosos vehículos de turistas que iban a visitar el monumento árabe. La policía quería evitar que aumentara el atasco de la zona. Dos policías recibieron asistencia médica, un número indeterminado de personas sufrió contusiones y al menos tres fueron detenidas.
Según la policía, los vendedores -alrededor de una veintena- se enfrentaron con los agentes de la pruínera unidad en llegar, hacia las 12.40 horas. Los agentes pidieron de inmediato refuerzos. A la llamada acudieron casi todos los vehículos en servicios y otros de la Policía Nacional. Los vendedores agredieron con piedras a los policías, mientras que éstos cargaron indiscriminadamente contra hombres y mujeres. El agente local José Antonio Pérez Vargas permanecía a media tarde de ayer en observación en el hospital Clínico, como consecuencia de una pedrada en la espalda.La policía detuvo al menos a tres personas, entre ellas una mujer. Todos fueron conducidos al ayuntamiento granadino, donde se concentró un grupo de vendedores que increpó a los policías y les llamó "criminales". Posteriormente, los deteníd. os fueron conducidos a comisaría. Una mujer de avanzada edad, madre de Juan Heredia Fernández, uno de los detenidos, mostraba un gran hematoma en el pecho.
Según la versión de la mujer, la policía aporreó sin previo aviso a los vendedores, y se organizó una batalla, en la que, según su versión, un agente hizo un disparo intimidatorio.
"En otras ocasiones ya se han registrado incidentes entre los vendedores, la policía y los servicios de vigilancia de la Alhambra, a causa de la venta ambulante.
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