La contribución urbana y el impuesto de plusvalías serán deducibles del IRPF
La contribución urbana, que pasará a denominarse impuesto inmobiliario, será deducible desde el año 1990 de la base del impuesto sobre la renta (IRPF), mientras que el impuesto sobre plusvalías podrá ser descontado de la cuota a pagar. Todo ello minorará los ingresos de la Hacienda central en unos 50.000 millones.Con estas medidas, incluidas en el proyecto de ley, regulador de la financiación de las haciendas locales, que será estudiado el jueves por la comisión de subsecretarios, todos los tributos municipales serán deducibles del impuesto sobre la renta, salvo el que grava la circulación de vehículos. La urbana sólo puede ser descontada hasta ahora de la base del IRPF por los arrendadores de viviendas, no por los propietarios que habiten en las mismas. Al declarar deducible de la cuota el impuesto municipal sobre plusvalías, Hacienda pretende evitar la doble imposición por un mismo acto:
El proyecto de ley, anunciado hace más de un lustro y discutido por el Gobierno con los alcaldes desde hace varios años, ha sufrido constantes modificaciones en este tiempo.
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