Silva Henríquez "Los militares no están hechos para molestar"

El cardenal chileno Raúl Silva Henríquez manifestó en el curso de un coloquio celebrado en Barcelona que "los militares no están hecho para gobernar", al menos en su país. El cardenal recibió ayer en Mataró el Premio por la Paz, que otorga anualmente la Asociación para las Naciones Unidas en España, precisamente por su labor. Silva Henríquez fue uno de los impulsores de la Vicaría de la Solidaridad, organización de ayuda a los represaliados."El golpe militar nos pilló por sorpresa", dijo el cardenal en el encuentro del pasado jueves con el Grupo Cristiano de Promoción y Defensa de los Derechos Humanos.

Silva Henríquez desvinculé a la Iglesia jerárquica del golpe militar chileno, "aunque algunos cristianos sí intervinieron". El Gobierno de Allende "quería imponer la dictadura del proletariado", según el cardenal.

Reconoció, sin embargo, que la izquierda tiene el campo abonado en un país donde sólo existen "ricos y pobres". De manera paradójica, dijo, "la dictadura militar ha conseguido que el comunismo haya cobrado más fúerza". El que fuera arzobispo de Santiago de Chile hizo una completa exposición de la doctrina social de la Iglesia ante la desigualdad.

Silva Henríquez afirmó que sus preocupaciones para salir de la actual situación son compartidas por el Departamento de Estado de EE UU. "No en vano, en todos los países de América Latina donde las dictaduras han sido derrocadas por la fuerza, ha triunfado el comunismo", dijo.

"En Chile tenemos estructuras medievales y no nos debe extrañar que el comunismo prospere en esta situación de injusticia social" agregó el cardenal chileno, para quien la principal preocupación en estos momentos es cómo salir de la actual situación política, en la que la dictadura se encuentra respaldada por las fuerzas armadas. "Que el Señor nos ayude", agregó, "y podamos tener unas elecciones con paz y tranquilidad".