Jesús Gil prestó ayer declaración por la querella de Mariano Rubio

Jesús Gil, presidente del Atlético de Madrid, prestó declaración ayer, en el Juzgado número 22 de Madrid, ante la juez María Lourdes Sanz, en relación con la querella presentada contra él por Mariano Rubio, gobernador del Banco de España.La querella criminal de Mariano Rubio y del banco emisor se ha presentado por el presunto delito de "injurias, calumnias y desacato" tras las declaraciones realizadas por Jesús Gil acusando a Rubio de "malversador" y de ser "el cáncer de la economía española". Gil insistió ayer en sus ataques, y dijo: "Voy a echar a Mariano Rubio del Banco de España".

Gil estaba citado a las diez de la mañana, y entró en los juzgados de la plaza de Castilla regalando insignias del Atlético de Madrid al público y estrechando manos "de gente sencilla, porque ya veis cómo he llegado al pueblo".

Antes de presentarse ante la magistrada, Gil realizó ya una primera y larga serie de afirmaciones. "Es una juez la que nos ha correspondido, pobrecilla, la que se le viene encima, con la cantidad de documentos que voy a poner a su disposición".

"Me parece muy mal que Joaquín Fanjul, el jefe del gabinete jurídico del Banco de España, sea el abogado de Mariano Rubio, porque de esta forma lo pagamos todos los españoles". "Yo no he criticado a una institución a la que respeto, pero estamos en una democracia y me parece lícito y hasta conveniente censurar a funcionarios, por muy altos que sean, si no hacen las cosas como deben en esas instituciones", agregó el presidente del Atlético de Madrid.

"Voy a echarle"

"Voy a echar a Mariano Rubio del Banco de España; es el cáncer de la economía, y sus ramificaciones llegan a muchos sitios: el pasado sábado he tenido problemas en el Banco Hispano Americano por las letras avaladas por el fichaje de Futre, cuando un subdirector general, San Pío creo que se llama, dejó caer la posibilidad de que se protestaran unas letras de cambio que este banco ya aceptó hace meses porque estaban avaladas personalmente por mí. Pero van listos; que píen. El Oporto ya libró esas letras, por importe de 315 millones, y el banco lo único que tiene que hacer es seguir el curso normal de la operación, que vence el 2 1,de febrero, porque yo no he incumplido en este asunto para nada".Gil prestó declaración ante la magistrada durante algo más de hora y media, en presencia de su abogado, José Luis Sierra, y de Joaquín Fanjul, el letrado de la parte contraria, que, entre otras cosas, solicita una indemnización de 1.200 millones de pesetas.

El presidente del club rojiblanco se reafirmó en todas sus declaraciones. Su equipo jurídico deberá entregar en el plazo de 48 horas un escrito de alegaciones con todas las pruebas que estime oportunas para demostrar las acusaciones contra Rubio.