Hacia Marte, vía Moscú

La NASA tiene como principal objetivo en este momento construir una estación espacial con un gran coste y un objetivo no muy bien definido. Lo razonable sería abandonar el proyecto y disponerse a conseguir un objetivo a largo plazo y más productivo: una misión conjunta a Marte con la Unin Soviética.No es éste un momento oportuno para misiones espaciales caras, y por ello gran parte del presupuesto de la NASA se dedicará a las más baratas, no tripuladas, como el lanzamiento de satélites para estudiar el clima y el medio ambiente de la Tierra. Pero la NASA necesita también un objetivo a largo plazo que oriente todos sus esfuerzos. Una misión conjunta a Marte forzaría a los Gobiernos de los dos países a una interacción extensa y positiva. La opinión pública reaccionaría de forma positiva porque en el proyecto vería una forma de colaboración mutua entre las superpotencias. Los soviéticos están dispuestos y sus ofertas de hacer un proyecto conjunto no están hechas desde una posición débil, porque sus planes respecto a Marte están claramente perfilados para los próximos años.

El presidente Reagan, gran entusiasta de los temas espaciales, perdió interés tras la explosión del Challenger. De todas formas, no es tarde todavía para dejar un legado más importante que la militarización del espacio: puede colocar en la agenda de su próxima entrevista con Gorbachov el tema de la misión conjunta a Marte.

, 28 de diciembre