La oposición municipal pide que se reelabore el presupuesto

Los tres partidos de oposición en el Ayuntamiento de Madrid, Alianza Popular (AP), Centro Democrático y Social (CDS) e Izquierda Unida (IU), han solicitado la reelaboración del presupuesto municipal para 1988 al no estar de acuerdo con los 68.000 millones de pesetas que el equipo de gobierno socialista tiene previsto invertir en operaciones urbanísticas durante los próximos cuatro años.Esta petición podría obligar al equipo de gobierno a retrasar el pleno extraordinario previsto para el día 11, pues de no variar ni el contenido del proyecto ni la fecha, la oposición está dispuesta a, forzar la retirada del proyecto.

CDS y AP afirmaron ayer, a través de sus portavoces, que no les había asustado el anuncio hecho por el primer teniente de alcalde, Luis Larroque, de no hacer inversiones en 1988 si el proyecto de presupuesto que presentan es derrotado. Los grupos poIíticos establecieron ayer sus primeros contactos, en el pleno destinado a aprobar las ordenanzas fiscales para 1988. Agustín Rodríguez Sahagún informó tras la sesión plenaria que esperaba una contestación formal del alcalde a la petición de su grupo de retirada del presupuesto de inversiones de gerencia. "Si el alcalde se empeña en mantener el presupuesto de gerencia por razones de conciencia y de compromiso electoral, tendremos que votar en contra. Si Larroque prefiere funcionar con el presupuesto de este año prorrogado, ello me parecería una torpeza política y jurídica".

José María Álvarez del Manzano, en nombre de AP, afirmó que la prórroga del presupuesto "es la única salida que tiene el equipo de gobierno si mantiene su proyecto en el pleno del día 11, puesto que ha de atender a las nóminas del personal y a las contratas que realizan los servicios. Este sistema no produce ningún daño a la corta. Es cierto que no se podrá hacer ninguna política nueva, pero la responsabilidad no es de la oposición".

Izquierda Unida, por su parte, calificó por boca de Francisco Herrera de "actuación defensiva" el anuncio de que no se haría el próximo año ninguna inversión si no se aceptaba el proyecto del equipo de gobierno. "Están dispuestos a tirar la toalla antes de que existan negociaciones", afirmó.

Herrera añadió que su grupo no puede aceptar la filosofia utilizada por el equipo de gobierno para realizar las operaciones urbanísticas que se pretenden acometer en los próximos cuatro años.

Esta postura de oposición general a la inversión propuesta por gerencia pone al equipo de gobierno en la tesitura de reelaborar en el plazo de una semana su propio presupuesto en un intento de lograr un consenso con el CDS o AP -se necesita mayoría relativa para aprobar los presupuestos-, retrasar el pleno con el fin de poder trabajar con más tiempo en esta revisión o llevar el proyecto tal como está redactado a la sesión plenaria del día 11 y exponerse a que sea derrotado.