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COMUNICACION

Los vídeos comunitarios emitirán en cadena desde el lunes para 1.600.000 espectadores

La principal agrupación de vídeos comunitarios, Avideco, con un número, de telespectadores próximo a 1.600.000, inaugurará el próximo día 7 una cadena de televisión por cable, al ofrecer a sus abonados seis horas de programación que se emitirá simultáneamente en toda España, según ha manifestado su presidente, Domingo Rosado. El sistema de emisión consiste en un magnetoscopio o vídeo, conectado por cable a los televisores de los abonados, generalmente vecinos de un mismo inmueble o manzana de viviendas.

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Canal 10, un satélite con cable

La emisión comunitaria implica la obtención previa de una copia en vídeo del programa que se emita para cada instalación.Esta medida y las negociaciones de algunos vídeos comunitarios con emisoras o promotores de programas de televisión por satélite, entre ellos Canal 10, forma parte de las nuevas estrategias de este sector, que corre el peligro de pasar graves dificultades con la entrada en vigor, precisamente el próximo día 7, de la ley de Propiedad Intelectual.La Ley obliga a obtener previamente los derechos de emisión dé películas y otras producciones audiovisuales, normativa a la que se añadirá en breve un real decreto elaborado por la Dirección General del Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales sobre la difusión de películas en soportes videográficos. La Ley prevé sanciones iniciales de hasta 600.000 pesetas por película y emisión.La segunda amenaza para los vídeos comunitarios proviene de la enmienda que el Grupo Parlamentario Socialista del Senado ha introducido en el artículo 25 de la ley de Ordenación de las Telecomunicaciones por la que el cableado a través de dominio público (como los tendidos aéreos) entre diferentes inmuebles que no pertenezcan a una misma comunidad de propietarios o a una misma manzana, tendría la consideración jurídica de servicio de televisión.La legalidad de los vídeos comunitarios -un magnetoscopio difunde programas de vídeo a los televisores que están conectados con él- se ampara en sendas sentencias de la Sala Tercera del Tribunal Supremo de enero y febrero de este año que sostienen que este tipo de emisiones no constituye servicio público de televisión. El argumento del Supremo -que dio pie a numerosas protestas del sector cinematográfico y videográfico por la emisión de películas y obras sin contratar o abonar los derechos pertinentes- establece que la exhibición de los vídeos comunitarios no tiene carácter público.La enmienda socialista al artículo 25 de la LOT se traduciría en una prohibición expresa de aquellos vídeos comunitarios que tengan tendidos aéreos de cable entre diferentes manzanas a través de espacios de dominio público.160 empresas sevillanas

Avideco, agrupa a 372 empresas de vídeos comunitarios en toda España, con una cobertura superior al medio millón de televisores, informa Juan Méndez. La asociación ha adquirido los derechos de autor de un lote de telefilmes, que emitirá durante un mes, entre los que se encuentran seriales como Simplemente María y Enamorada, así como películas y series de dibujos animados de producción española. Todos sus afiliados emitirán la misma señal con el copyright de la película y su número de socio de Avideco sobreimpresionado en la pantalla.Sevilla es una de las ciudades con mayor número de familias abonadas a vídeos comunitarios, pues están en ella 160 empresas de las 372 asociadas a Avideco, y emiten su programación a más de 260.000 hogares de la provincia. Normalmente se trata de grandes redes, que en ocasiones cubren un barrio entero. La instalación para recibir la señal se negocia independientemente con cada comunidad de vecinos, y su coste depende del número de familias que deseen la conexión. Entre las 1.000 y las 3.000 pesetas por abonado cuesta llegar hasta el bloque de vecinos a señal, que se efectúa mediante un cable conectado a la antena colectiva. A partir de ella -una simple conexión también por cable- a cada televisor permite la captación de las imágenes. Posteriormente los abonados al servicio pagan una cuota mensual de 600 pesetas por disfrutar de cuatro películas diarias, excepto sábados y domingos, que suelen ser cinco más, además de una "sesión especial de media noche" porno duro a partir de la una de la marugada. Algunas empresas han incluido en su programación retransmisiones en diferido de partidos de fútbol o baloncesto principalmente. Avideco aseguró ayer que todos los afiliados cumplirán a partir del día 7 la normativa aprobada sobre los derechos de propiedad intelectual.

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