La OTAN pide a España que garantice la disponibilidad de sus fuerzas

La Alianza Atlántica pretende exigir de España un firme compromiso que garantice que podrá contar, en caso de conflicto, con las fuerzas españolas que desempeñen misiones para la OTAN. Tal compromiso debería quedar sentado, según fuentes de la Alianza, en los acuerdos de coordinación entre los mandos españoles y los de la OTAN, el primero de los cuales podría firmarse ya en diciembre o en enero. Se espera que las próximas reuniones ministeriales en la OTAN aprueben documentos explicitando el caso español.La próxima sesión de negociación o consultas entre España y la OTAN se celebrará a finales de octubre en Bruselas, según señalan fuentes de la Alianza. Ambas delegaciones están además preparando documentos que desarrollen el memorándum de mayo de 1986 para presentar a los ministros. Los titulares de Defensa aprobarán un documento que desarrolla los aspectos más militares del memorándum en su reunión como Comité de Planes de Defensa, a principios de diciembre en Bruselas. Los aspectos más políticos formarán parte de otro documento que aprobarán los titulares de Asuntos Exteriores la semana siguiente.

En la próxima sesión de negociación, España habría ya de contestar qué misiones militares desempeñará para la OTAN y con qué unidades. Estas misiones se centrarán en el terreno aeronaval, en el eje Baleares-Estrecho-Canarias, y en el Atlántico, en la zona del noroeste de la Península, "principalmente", indican medios atlánticos y españoles. Algún os medios españoles expresan cierta preocupación por el escaso papel que representa el Ejército de Tierra en la contribución militar a la OTAN.

En el terreno formal, y para evitar caer en la integración militar, España planeará sus objetivos de fuerza y sus misiones para la OTAN según un esquema análogo al de los países integrados, pero sin que al principio de la cadena de planeamiento intervengan directamente los mandos militares integrados de la Alianza. No obstante, medios de la Alianza indican que Ios mandos intervendrán desde el principio en el caso español".

España, indican estas fuentes atlánticas, nombrará en breve un "representante militar nacional a efecto de enlace" ante el mando de la región sur de la OTAN situado en Nápoles ante otros mandos integrados.

Acuerdos de coordinación

Todo esto despeja el camino para la firma de los primeros acuerdos de coordinación militar, que fijarán las circunstancias y las misiones que España desempeñará para la OTAN.Por ello la OTAN quiere que estos acuerdos incluyan una firme garantía de que se podrá contar con las fuerzas españolas incluidas en estos esquemas de coordinación Ilegado el momento". España rechaza, sin embargo, toda garantía de compromiso automático de sus fuerzas en caso de tensión, crisis o conflicto, según indican fuentes españolas.